Ya hay fecha para que Carlo Acutis, el santo millennial, sea canonizado. El joven italiano que murió producto de una leucemia fulminante en 2015, y que tiene acreditado dos milagros, será declarado santo por la Iglesia católica el próximo año, declaró el Papa Francisco, durante la Audiencia General del miércoles 20 de noviembre.
Con relación a sus milagros, Acutis habría intercedido para salvar la vida de un niño brasileño con una malformación congénita del páncreas. Mientras el segundo caso, se le atribuye la recuperación de una niña accidentada de su cráneo tras una fuerte caída.
Por consiguiente, el Papa Francisco llevará a cabo la ceremonia, en el Jubileo de los Adolescentes, instancia que se celebrará entre el 25 y 27 de abril, momento en que será el primer santo millennial, nacido entre los 80 y finales de los 90.
Quién es Carlo Acutis
A muy temprana edad, Carlo, era un cristiano devoto y asistía a misas diarias, rezaba el rosario y, según sus biógrafos, defendía a sus compañeros de los acosadores del colegio.
Cuando llegó a la adolescencia, Carlo se convirtió en el “influencer” de Dios, dando a conocer los misterios eucarísticos. Una tarea que el papa Francisco ha halagado por su dedicación. “Supo utilizar las nuevas técnicas de comunicación para transmitir el Evangelio, comunicar valores y belleza”.
Por otra parte, la madre de Carlo, Antonia Salzano, aseguró que su hijo le había avisado sobre su futuro nombramiento como santo. “Hace algunos años, tuve un sueño con Carlo, quien me dijo: ‘Seré beatificado pronto y poco después canonizado’. Cuando se estaba muriendo, la última semana de su vida, soñé con San Francisco de Asís, que es el santo patrono de nuestra familia, y me dijo: ‘Tu hijo, Carlo, morirá muy pronto, pero lo hará siendo considerado muy alto en la Iglesia. Entonces vi a Carlo en una iglesia muy grande, en lo alto, cerca del techo, y no entendí entonces. Por supuesto que ahora sí”, consignó Infobae.
El joven que fue enterrado en la basílica de Asís, es objeto de devoción por los miles de feligreses que viajan a su tumba.