Boris Johnson estuvo hace poco más de un mes recorriendo Rapa Nui, lugar al que arribó en compañía de su esposa, además de tener un encuentro con la familia Piñera Morel.
El exPrimer Ministro Británico planteó sus opiniones sobre la Isla de Pascua en una reciente columna en el diario Daily Mail. Más alguna fue bastante peculiar.
“Nunca habíamos visto un paisaje tan encantador ni tan solitario. Podría ser la costa oeste de Irlanda, de no ser por estos extraños volcanes cónicos verdes de cientos de metros de altura”, planteó de entrada.
Asimismo, el político expuso su emoción por haber tocado uno de los moais caídos, considerados como sagrados en el lugar.
Boris Johnson en Rapa Nui
“Hemos llegado al recinto sagrado y no puedo contener mi curiosidad. Extiendo la mano para tocar una de las estatuas caídas, o moai, con su frente colosal enterrada en el césped y el lóbulo de su oreja tan alto como nosotros”, escribió.
“Cuando miro hacia abajo, veo que en realidad estamos parados sobre una de ellas. Bajo nuestros pies, casi completamente enterrada, hay la forma de un rostro humano”, añadió.
No obstante, la nota tuvo una exposición bastante particular por parte de Johnson. Esta tiene relación con, a su juicio, la seguridad que ofrecería el lugar en caso de un conflicto mundial.
“Si de verdad te preocupa la Tercera Guerra Mundial y quieres evitar la lluvia radiactiva, este es el lugar ideal”, fue lo que escribió.
Hay que señalar que, sobre el final, el exmandatario británico planteó su postura respecto a los motivos que hicieron colapsar la cultura en Rapa Nui.
“No fue la pobreza, ni las enfermedades, ni las malas cosechas, ni la hambruna. Y, sin duda, no fue un problema medioambiental relacionado con la erosión del suelo lo que provocó el colapso de la cultura de la Isla de Pascua”, detalló.
“Fue la política la que destruyó esta asombrosa civilización, como ocurre casi siempre. Y esa es la verdadera lección para la raza humana”, concluyó.