El cráter Darvaza ha ardido en el desierto Karakum (Turkmenistán), por más de 70 años. Se trata de un agujero en la Tierra que fue creado por error por ingenieros rusos, al buscar las reservas de gas natural en aquella zona. Su nombre común es la ‘Puerta al Infierno’.
Es una de las postales más conocidas de Turkmenistán, uno de los países más raros y herméticos del mundo, siendo incluso un destino turístico.
No obstante, en 2022 el presidente Gurbanguly Berdymukhamedov ordenó que el cráter de 70 metros de diámetro y 20 de profundidad debía apagarse.
Sus argumentos tenían relación con el desperdicio de gas en el lugar y la contaminación que estaba afectando a los pueblos cercanos.
“Estamos perdiendo valiosos recursos naturales de los que podríamos obtener ganancias significativas y utilizarlos para mejorar el bienestar de nuestra gente”, indicó en una rueda de prensa nacional.
Lo cierto es que, a dos años de aquel anuncio, parece no haber grandes avances al respecto.
De acuerdo a National Geographic, citando a Smithsonian Magazine, han existido esfuerzos científicos por hallar métodos efectivos de extinguir el lugar, pero hasta el momento no hay una solución.
‘Puerta al Infierno’ de Turkmenistán
De hecho, reportan, todas las soluciones lógicas que se podrían utilizar son “inútiles”.
Incluso fue consultado el ingeniero canadiense George Kourounis, quien bajó al fondo del cráter.
Para el experto, el gas siempre va a encontrar formar de salir a la superficie, por lo que “la solución no está a la vuelta de la esquina”.
“Entonces, incluso si tuviera que extinguir el fuego y cubrirlo, existe la posibilidad de que el gas aún pueda salir a la superficie y todo lo que se necesitaría es una chispa para encenderlo nuevamente”, sostuvo a fines de 2023.
Hay que señalar que, en la actualidad, el gas natural representa la base de la economía de Turkmenistán, país donde más del 70% de la población viviría en la pobreza.