Garry Kozak | Clarin

Hallan los restos de avión perdido hace más de 50 años en un lago de EE.UU: iban cinco personas abordo

14 junio 2024 | 18:02

Casi medio siglo después de su desaparición, encuentran los restos de un pequeño avión privado donde iban cinco personas abordo. La aeronave fue hallada en las profundidades del lago Champlain en Estados Unidos.

La última vez que se tuvo registro de la avioneta fue el pasado 27 de enero de 1971, cuando despegó desde el Aeropuerto Internacional de Burlington, en el estado de Vermont, con dirección a Providence, Rhode Island, en medio de una fría noche de invierno.

De acuerdo con The Independent, dentro del avión había dos miembros de la tripulación y tres trabajadores de la empresa Cousin’s Properties, una compañía promotora con sede en Atlanta, Georgia.

Desde aquel día, no se volvió a saber de los ocupantes del jet corporativo, identificados como George Nikita, Donald Myers, Frank Wilder, Richard Kirby Windsor y Robert Ransom Williams III.

La desaparición de la aeronave desató múltiples búsquedas, llegando a contabilizarse 17 a lo largo de los años. Sin embargo, no se pudo encontrar ningún rastro de los ocupantes ni de la nave.

A más de 50 años de este suceso, el equipo del investigador submarino Garry Kozak halló los que serían los restos del antiguo avión privado con ayuda de un vehículo operado a distancia (ROV) en el fondo del lago Champlain, justo en el área donde se registró la última señal de la nave antes de desaparecer.

Encuentran restos de avión perdido en lago de Estados Unidos

Según consignó Clarín, las imágenes capturaras por el sonar muestran parte de la estructura del jet corporativo. Los restos están ubicados a unos 60 metros de profundidad, frente a la zona de Juniper Island, Vermont.

Tras el hallazgo, Kozak afirmó que “con todas esas pruebas, estamos 99% seguros” de que los restos corresponden al avión desaparecido. También, el investigador aseguró que esta noticia es “un cierre y responde a muchas de las preguntas que tenían” los familiares de las víctimas.

En entrevista con The Associated Press, Bárbara Nikita, sobrina del piloto George Nikita, sostuvo: “Que lo hayan encontrado ahora… conlleva una sensación de paz, pero al mismo tiempo una sensación muy triste”.

“Sabemos lo que pasó. Hemos visto unas cuantas fotos. Creo que ahora estamos lidiando con eso”, agregó Nikita.

Por su parte, Frank Wilder, cuyo padre estaba abordo del avión, mencionó que “pasar cincuenta y tres años sin saber si el avión estaba en el lago o tal vez en la ladera de una montaña, en algún lugar fue angustioso”.

Por ahora, la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) estará a cargo de una investigación para verificar que los restos hallados en lo profundo del lago pertenezcan al jet corporativo perdido en 1971.