Un hombre de 35 años con problemas mentales murió por “complicaciones de una severa negligencia” en una cárcel de Estados Unidos, lo que incluyó una desnutrición severa, deshidratación y ser “comido vivo por chinches”.
Así dio cuenta una autopsia independiente efectuada al cuerpo de Lashawn Thompson, quien en los tres meses que estuvo en la cárcel del condado de Fulton en Atlanta, perdió casi 15 kilos.
De acuerdo a Unilad, Thompson ingresó a la prisión el 12 de junio de 2022 por un delito menor de robo tras no poder pagar la fianza.
Sólo 3 meses después, el 13 de septiembre, fue hallado inconsciente en su celda.
Según el informe del incidente presentado por la cárcel, el cuerpo del hombre estaba en el baño y completamente cubierto de insectos.
No obstante, la causa de muerte figuraba como “indeterminada”.
Autopsia independiente califica la muerte como “homicidio”
Luego del primer informe, la familia del hombre solicitó ayuda la organización Know Your Rights Camp, del exjugador de la NFL Colin Kaepernick.
Esta última los apoyó pagando a Roger Mitchell Jr, ex médico forense jefe en Washington, DC, para que realizara una autopsia independiente.
En este análisis se estableció que el hombre estaba desnutrido, deshidratado y con “infestación severa de insectos corporales”. También se detalla que previo a su muerte estuvo con una esquizofrenia descompensada no tratada.
“El registro de administración de medicamentos mostró que no se administró ningún medicamento desde el 11 de agosto hasta el 13 de septiembre de 2022”, dio cuenta el informe.
“Según el cronograma proporcionado, Lashawn Thompson sufrió una grave infestación de insectos corporales que claramente duró más de 28 días. Durante el tiempo que tomó acumular la infestación extrema y sustancial, el Sr. Thompson no habría recibido un baño de parte de sus cuidadores”, sentenció.
Tras identificar las circunstancias, Mitchel determinó que Thompson murió por “homicidio”.
“El Sr. Thompson fue abandonado hasta la muerte”, indicó el forense.
“Su inacción, crueldad e inhumanidad lo mataron”
Ben Crump, abogado de derechos civiles y representante de la familia de Thompson, dijo en una conferencia que “este es el caso de muerte y custodia más deplorable de la historia”.
Crump también indicó que el hombre tenía más de 1.000 picaduras y que se encontraron insectos (chinches) en su boca, orejas, nariz y en todo su cuerpo, consignó BBC.
“Es insondable que nadie que trabaje en esta instalación movió un dedo para ayudar a Lashawn mientras moría lentamente durante tres meses bajo su vigilancia. Su inacción, crueldad e inhumanidad lo mataron”, enfatizó.
Al respecto, el alguacil del condado de Fulton, Pat Labat, emitió una declaración donde admitió que hubo fallas que desembocaron en la muerte del hombre.
“No he tenido la oportunidad de revisar completamente el informe de la autopsia independiente. Sin embargo, incluso antes de que se emitiera este informe, estaba dolorosamente claro que hubo una serie de fallas que llevaron a la trágica muerte del Sr. Thompson”, afirmó.
“Ya he responsabilizado al personal ejecutivo responsable de las operaciones de la cárcel al solicitar y recibir las renuncias del Jefe de Carceleros, el Asistente del Jefe de Carceleros de Vivienda y el Asistente del Jefe de Carceleros de la División de Investigación Criminal”, añadió.