Un oso negro asiático entró en un supermercado de la ciudad de Akita en Japón, donde estuvo tres días: atacó a un empleado, y saqueó la sección de carnes. Tras todo lo anterior, fue capturado y posteriormente sacrificado por policías durante este lunes.
Unos 20 empleados del supermercado de aquella ciudad, fueron sorprendidos el pasado sábado por la entrada de un oso, de aproximadamente, un metro de altura, mientras se preparaban para el inicio de la jornada.
Durante su inesperado ingreso, el animal atacó a uno de los trabajadores, de 47 años, quien sufrió heridas en su rostro, según informó la Policía y recogieron medios locales.
Oso irrumpe en supermercado
Luego de tres días en el interior del establecimiento, el animal saqueó la sección de carne y dañó algunos estantes, según indicó la policía.
Mientras tanto, a las afueras del lugar, los agentes de policía con equipos de protección y escudos, intentaban ingresar al supermercado desde una entrada cubierta por un trozo de plástico, según imágenes de los medios locales.
Ya para el tercer día, las autoridades lograron que el animal quedara atrapado en una de las trampas con miel, manzanas y pan que instalaron para aprehenderlo en una zona de almacenamiento de la tienda, para posteriormente sacrificarlo.
¿El cambio climático el responsable?
Los expertos afirman que la disminución de la población humana en las zonas rurales de Japón está provocando que los hambrientos osos se acerquen a pueblos y ciudades cercanas.
Sin embargo, otros de los relevantes factores es el cambio climático, el cual provoca una escases de frutos e insectos de los cuales los osos se suelen alimentar. Esto último los empuja a aventurarse en entornos poblados en busca de sustento.
“El número de ataques de osos en la prefectura fue mayor de lo habitual este año después de alcanzar un récord el año pasado”, dijo a CNN un portavoz del Ayuntamiento de Akita.
A esto último complementaron que Japón también registró el mayor número de lesiones y daños a la propiedad, como resultado de ataques de osos en el año fiscal que terminó en marzo.
Sumado a ello, en el año fiscal anterior se realizó una cifra récord de 9.097 osos sacrificados, más del doble que en el periodo anterior, según el Ministerio de Medio Ambiente, detalla DW.