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La modelo y empresaria argentina Mar Tarrés generó controversia al vender un taller motivacional sobre su pérdida de peso de 44 kilos, luego de años promover la aceptación corporal. Tarrés, quien antes era conocida por ser activista body positive, ahora cobra por compartir su experiencia, lo que ha generado críticas y acusaciones de estafa piramidal. La argentina justifica su accionar argumentando que busca que la gente "gorda y pobre se deje de quejar" y asume que su nuevo enfoque es para que asuman responsabilidad por su salud y mejoren su situación económica. Las reacciones han sido variadas, con seguidores cuestionando su cambio de enfoque y acusándola de aprovecharse de la "desesperación e ignorancia" de algunas personas.
“Realmente necesito que la gente gorda y pobre se deje de quejar”, fueron las palabras de la modelo, influencer y empresaria argentina Mar Tarrés, luego de recibir una ola de críticas por cobrar para contar detalles de su baja de peso.
La mujer, que era conocida por ser activista “body positive” y promover la aceptación del cuerpo, perdió 44 kilos, causando sorpresa entre sus seguidores.
Tal como cuenta Perfil, por medio de su cuenta de Instagram, Tarrés anunció que estaba vendiendo un taller motivacional donde contaría su experiencia con la pérdida de peso, acompañada de profesionales de la salud especialistas en obesidad.
“No existen dietas mágicas, existen personas mágicas que te contagian, te enseñan, te ayudan y te motivan. Van a conocer un equipo hermoso que cambia vidas”, aseguró.
Como parte de la misma promoción, mostró una antigua camiseta que ahora le quedaba muy grande. “Miren esta remera, yo la usaba para ir al gimnasio o la usaba para estar de entre casa”. Luego, se quitó la polera y presentó su figura notablemente más delgada.
“Ya empieza el taller de descenso de peso, súmate a esta movida porque te va a cambiar la vida como me la cambió a mí. Estoy muy contenta porque van a tener a los mejores profesionales de la salud”, aseguró.
Polémico taller para bajar de peso de Mar Tarrés
Tarrés dijo que participar de este taller tenía un costo de 15 mil pesos argentinos (prácticamente lo mismo en pesos chilenos) y también afirmó que quería darle la posibilidad a la gente que no tiene para comer sano ni pagar estudios médicos, para que pueda vender talleres y “quedarse con la mitad de la plata”.
“Los talleres hoy están en 15 mil pesos, entonces se quedarían con 7.500 cada uno. Si vendés 10 talleres, serían 75 mil pesos a la semana. Vendiste 20 talleres y son 150 mil pesos”, explicó en un video.
Luego, justificó su particular modelo de negocio que algunos ya tildan de “estafa piramidal”, señalando que esto lo hacía “porque realmente necesito que la gente gorda y pobre se deje de quejar”.
“Primero, para que empiecen a responsabilizarse por su salud y bajen de peso, segundo que dejen de vivir en la pobreza y empiecen a vivir en la abundancia”, añadió en declaraciones recogidas por Clarín.
Estas palabras vienen después de que la mujer recibiera una ola de críticas entre quienes creen que su actuar es inconsecuente, considerando que durante años promovió la “aceptación corporal”.
“Estuvo años hablando del amor propio, mientras curraba con talles plus size, ¿y ahora curra con un método para adelgazar?”, comentó una seguidora, mientras otros cuestionaran que hiciera un negocio aprovechándose de la “desesperación e ignorancia” de algunas personas.
“Uno pierde kilos, pero no debería perder convicciones. Se extraña a la otra Mar, la actual está chipeada. El descenso de peso es algo absolutamente personal”, dijo otro usuario en redes sociales.
Todo esto a Mar Tarrés parece no haberle importado, pues continuó promoviendo su taller y como única “medida de contención” prometió dar cupos gratuitos a algunos de sus seguidores.
