El español Daniel Sancho enfrenta con aparente calma la sentencia que se dictará el próximo 29 de agosto, donde se determinará si es culpable o no del asesinato premeditado del cirujano colombiano Edwin Arrieta. Los hechos ocurrieron el 2 de agosto de 2023 en la isla de Phangan, en Tailandia.
Sancho, de 30 años, afirmó estar “preparado para lo mejor y para lo peor” en declaraciones ofrecidas el 22 de agosto desde la prisión de Samui, al sur de Tailandia.
Durante su conversación con la agencia EFE, a través de un cristal y un teléfono, Sancho expresó su optimismo, convencido de que el juez no considerará que la muerte de Arrieta fue un asesinato premeditado.
Según Sancho, las pruebas forenses presentadas por la defensa demostrarían que la muerte fue consecuencia de una pelea, argumentando que “quedó claro que fue un accidente”.
Tras más de un año en prisión preventiva, Sancho reconoció que la espera para conocer la sentencia ha sido difícil, describiendo los meses posteriores al juicio como “muy largos”. El juicio, que se celebró a puerta cerrada en el Tribunal Provincial de Samui entre el 9 de abril y el 2 de mayo, permitió al acusado tener un papel activo, ya que el juez le permitió hacer preguntas a los testigos.
Sancho describió su actitud previa al juicio como la de “un hombre con una misión”, indicando que dedicó mucho tiempo a prepararse para el proceso.
Durante el juicio, la defensa de Sancho argumentó que la muerte de Arrieta se produjo accidentalmente durante una pelea, y que el español actuó en defensa propia ante un supuesto intento de agresión sexual.
Condena a Daniel Sancho
Sin embargo, la Fiscalía presentó numerosas pruebas y testimonios que, según ellos, demostrarían que Sancho planificó el asesinato y posterior descuartizamiento de Arrieta. Los restos del cirujano, de 44 años, fueron encontrados en varios lugares de la isla, incluidos el mar. La autopsia realizada a Arrieta no fue concluyente debido a la falta de partes clave del cuerpo, como el torso.
A pesar de la gravedad de la situación, Sancho mantiene su rutina habitual de ejercicio y lectura en prisión mientras espera la sentencia. El acusado, quien inicialmente confesó el crimen ante la Policía de Phangan, acudirá al tribunal de Samui para la lectura de la sentencia, en un proceso que ha generado una gran atención mediática.
La sentencia ya ha sido redactada y enviada para su ratificación a la oficina del juez decano de Surat Thani, un trámite habitual en Tailandia para casos graves.
En Tailandia, el código penal contempla penas que van desde 15 años de cárcel hasta la pena de muerte para casos de asesinato, aunque esta última rara vez se aplica.
Sancho también enfrenta cargos por descuartizar el cuerpo de Arrieta y hacer desaparecer su pasaporte, delitos que podrían conllevar entre uno y seis años de prisión.
El acceso a la sala durante la lectura de la sentencia será restringido, aunque se espera la presencia de los padres del acusado, el actor Rodolfo Sancho y la analista de inversiones Silvia Bronchalo, así como del fiscal y los abogados involucrados.
La familia de la víctima, por su parte, no tiene previsto asistir y no ha hecho declaraciones sobre cómo afrontan el fallo.