Ambas aseguraron que iban al país a ver la coronación de Carlos III, pero cometieron una serie de delitos. En juicio incluso fueron reprendidas.

Este viernes el medio Daily Mail dio a conocer el caso de dos mujeres chilenas que serán deportadas de Reino Unido luego de protagonizar un millonario robo en una mansión de Cheshire.

En concreto, Francisca Santana y Rosa Dotes-Perez irrumpieron en la mansión de Bernadette Pinkerton, donde sustrajeron joyas y productos avaluados en 15 millones de libras esterlinas.

No obstante, fueron detenidas mientras esperaban tomar un vuelo de retorno hasta Sudamérica, cuando iban hacia el aeropuerto John Lennon de Liverpool. Su vehículo, además, tenía matrícula falsa.

Con el paso de los días salieron a la luz más detalles respecto a este caso. Las mujeres fueron catalogadas como “delincuentes internacionales”.

En este sentido, Santana y Dotes-Pérez indicaron en los interrogatorios que habían viajado a ese país para observar la coronación de Carlos III, hecho que ocurrió el pasado 6 de mayo.

Luego de su formalización, las dos involucradas aseguraron estar pasando por problemas mentales, a modo de justificar su actuar.

La primera de ellas fue sentenciada a cumplir prisión, en un inicio, por un tiempo de 20 meses, mientras que la segunda quedó en un recinto penal para jóvenes, teniendo en cuenta que tiene 19 años.

Familia asaltada por chilenas
Daily Mail

Chilenas deportadas desde Reino Unido

El robo se produjo el pasado 1 de junio. La familia afectada declaró durante el juicio, asegurando que estaban de vacaciones cuando las mujeres desvalijaron la mansión.

“Mi esposo y yo hemos trabajado duro para pagar una casa, un automóvil y todas las cosas bonitas, como bolsos de diseñador”, expusieron en un comunicado.

“Algunos de estos bolsos fueron regalos comprados por amigos y familiares que también trabajaron duro para comprarlos”, agregaron.

Durante una de las audiencias, ambas incluso tuvieron una reprimenda de parte del juez Simon Berkson, quien fue severo.

“No les importaba lo que significaban los objetos de valor sentimental para los dueños o que hubieran sido obtenidos a base de trabajo duro. No les importa que el allanamiento de morada deje un efecto psicológico inevitable en quienes lo viven, incluso cuando no están presentes en la dirección”, comentó.

“Afecta su psique, y como dos de ustedes tienen sus propios problemas de salud mental, pueden imaginar el nivel de impacto que su crimen ha tenido en las víctimas”, añadió.

Las dos mujeres deberán cumplir su condena en Chile, luego que se concrete el proceso de deportación. Probablemente, no podrán volver a entrar a Europa.