Una pareja de influencers rusos estaba convencida de que la luz solar era una fuente de alimento y ahora ambos fueron arrestados luego de que su hijo de un mes muriera de “inanición prolongada”.
De acuerdo al medio Perfil, se trata de Oxana Mironova, de 33 años, quien se encuentra bajo investigación por negligencia, lo que habría derivado en la muerte de su hijo, y su pareja Maxim Lyutyi, de 43 años, quien fue arrestado por resistencia a la Policía.
Ambos eran conocidos como aquellos que crecían que era posible “alimentarse de la luz del sol”. En particular, Lyutyi se describía como un “vegano radical”, mientras que su esposa Mironova había fundado el canal “The Living Man”, centrado en mejorar la salud y bienestar de sus miembros.
El hijo de tan solo un mes de vida de la pareja murió por “inanición prolongada”, según informó Daily Star. Asimismo, el medio The Sun informó que el pequeño habría muerto luego de que su padre intentó implementar con él su “sistema de nutrición” a base de luz solar.
Además, se difundió que el bebé también habría estado sufriendo una neumonía, producto de la misma inanición, antes de morir. En consecuencia, su madre fue puesta bajo arresto domiciliario durante dos meses por orden de un juez y un comité de investigación ruso abrió un caso penal para investigar el caso.
Creyeron que alimentaban a su hijo con luz solar…
Fueron los medios locales quienes expusieron los frecuentes consejos de Lyutyi sobre alimentarse de la energía y nutrientes del sol, reemplazando así la ingesta de comida y agua convencionales.
“La versión preliminar de la muerte del bebé es un agotamiento severo…ya que el bloguero trató de inculcarle su sistema de nutrición al bebé”, manifestó el informe de la investigación preliminar sobre la muerte del pequeño, según reveló el medio Zvezda News.
A su vez, una de las abuelas del menor fallecido declaró al Mirror británico y acusó al padre por la muerte de su nieto: “Quería experimentar con el niño, alimentarlo únicamente con el sol y luego anunciar a los demás que así es como se puede comer”.
“Estaba en contra de que mi hija estuviera en esta secta. Lo sentí todo y le dije que Maxim estaba loco, pero no me escuchó. Oxana vivía allí como un conejillo de indias. Cada vez se volvía más fría conmigo. Ella era su esclava”, agregó por su parte Galina, la madre de la mujer detenida.