En Villa Fiorito, al sur del Gran Buenos Aires, junio parecía iniciar de forma normal. Nadie sabía sobre la venganza de una madre, contra su pareja, por violar a su hija.
En la localidad de casi 50 mil habitantes, estalló un crimen horroroso dadas sus características que salieron a la luz en medios trasandinos como Clarín.
Todo tiene una perturbadora explicación cuando se conocen los antecedentes del hombre, víctima-victimario de esta historia, y del sufrimiento de una niña.
La madre de esta y sus dos hijos, carniceros de oficio, parte de una familia que no imaginó lo que se avecinaba, tras verse involucrados en la situación.
Una denuncia por desaparición
El pasado 1 de junio, una cámara de seguridad en Villa Fiorito captó a Daniel Tomás Silvero (56 años) entrando a la vivienda que compartía hace casi tres años con Laura Marcela Campos, de 47 años. Hasta ahí, una aparente llegada al que era su seno familiar, pero que en realidad no tendría retorno.
Pasados 6 días, una de las hijas del sujeto (de una pareja anterior), denunció a las autoridades su desaparición. Antes, le comentó que arrendaría una nueva vivienda y que cambiaría el chip de su celular.
Con la desaparición reportada, cuando la policía comenzó las indagaciones, Laura Marcela le dijo a las autoridades que Daniel se fue a pescar y que, a una semana transcurrida, no había vuelto.
La información de familiares del sujeto y la que proporcionó la pareja de este, no concordaban en lo absoluto.
Sin embargo, más tarde confesaría la verdad, ante la presión de las preguntas policiales y de un hallazgo macabro en la localidad donde una mujer se vengó de su marido por violar a su hija.
Asesinado y descuartizado: la venganza de una mujer por violar a su hija
Transcurría la segunda semana de junio cuando las autoridades fueron alertadas del hallazgo de restos humanos en un basurero de Villa Fiorito, Lomas de Zamora. Eran partes de un cuerpo (piernas mutiladas) descuartizado, como en una carnicería donde destaza carne animal.
La indagación estaba en marcha y Laura Marcela, en la mira de la autoridad.
La presión fue tal, que la mujer confesó la autoría del asesinato a golpes, de Daniel, indicando que posteriormente esparció sus restos por varias partes de la localidad provincial bonaerense.
Debido a esto, otros restos fueron apareciendo por la zona, incluida la cabeza del sujeto en una cubeta de cemento en un arroyo.
La madre de tres hijos indicó que lo hizo, debido a que éste violó a su hija desde que tenía 12 años. Consta una denuncia al respecto en 2019, pero siguieron viviendo juntos, hasta que decidió matarlo.
Si bien aseguró que era la autora de haberlo asesinado y descuartizado, las indagaciones apuntaron a sus dos hijos de 18 y 20 años, quienes trabajaban como carniceros en la comunidad.
Los 3 fueron arrestados por el crimen de Daniel Tomás Silvero, suceso que acaparó la atención mediática local, dada las características del conjunto de hechos.
Los antecedentes previos a ser asesinado y descuartizado
Laura Marcela Campos aseguró una y otra vez que era la autora material e intelectual de los hechos. Sin embargo, ella y sus hijos yacían encerrados luego de la confesión.
La hija de la mujer se enfrentó a otro golpe de realidad, al ver a su madre y hermanos en prisión.
Sin embargo, no sería la única víctima de violación de Daniel Silvero. En 2010, el sujeto fue denunciado por violar a una de sus hijas biológicas, pero el medio argentino Clarín sostiene que esa causa fue archivada.
Casi una década después surgió la nueva denuncia en su contra, que fue su trágico fin, luego que una madre confesó haberlo asesinado y descuartizado por violar a su hija.
La Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 16 Especializada en Violencia de Género y Violencia Familiar, se hizo cargo de la diligencia, puesto que en la confesión de la mujer, consta que Daniel ejerció violencia física y sexual en la vivienda que compartieron. Ella dijo que actuó en defensa propia debido a los vejámenes que el hombre cometió.
La familia de Daniel Silvero, en cambio, asegura su inocencia y que fue una víctima de Campos y sus hijos carniceros, según publicó Crónica.
“Lo cortaron como una vaca”, aseveró su hijo, Mariano Silvero.
Lo asesinó y descuartizó por violar a su hija: un giro inesperado
Había transcurrido un mes cuando Argentina conoció del hombre que apareció descuartizado, tras ser asesinado por su pareja, por violar a su hija.
El pasado 5 de julio, otros medios argentinos, como la agencia de noticias Telam, informaron el giro inesperado en la causa contra Laura Marcela Campos y sus dos hijos carniceros que le ayudaron a desmembrar el cuerpo de Daniel Silvero.
La mujer, junto a Mariano Gabriel (18 años) y Fabián Alejandro (20 años), recuperaron su libertad ante el asombro de la sociedad argentina.
“Cometieron el crimen porque eran víctimas de violencia de género y familiar en todas sus formas”, pronunció la jueza Laura Ninni.
La fiscal del caso, Marcela Juan, expresó en sus argumentos que “la familia Campos vivía en una situación de violencia desde 2014”.
Acusados de homicidio agravado por el vínculo y por el concurso premeditado de dos o más personas, la madre y los dos hermanos de la víctima de violación de Daniel, quedaron en libertad condicional.
Deben presentarse a firmar mensualmente la medida sustitutiva a la detención. Se cambiaron de localidad.
Se supo, en medio del juicio, que Marcela conocía a Silvero desde hace 24 años. Para ese entonces, el sujeto tenía otra pareja y 11 hijos. Ambos tuvieron un hijo en común, que es menor de edad. Sin duda, también víctima de la situación como su hermana adolescente, abusada por su padrastro, según las acusaciones.