A fines de abril, una mujer de 93 años fue hallada muerta al interior de un congelador en Florida (Estados Unidos). Los detalles del caso fueron revelados la semana pasada y apuntaron a su hija como la responsable de los hechos.
Hace unos días, la policía local acusó a Michele Hoskins, de 64 años, hija de la víctima, de no reportar la muerte de la anciana y ocultar el cuerpo durante seis semanas después de su deceso.
De acuerdo con un comunicado del Departamento de Policía de Sebastian, el macabro hallazgo se logró luego de que unos preocupados vecinos alertaron a las autoridades de no ver a su vecina, Marie Hosking, salir o entrar a su casa desde hace varios días.
En reiteradas ocasiones las autoridades se presentaron al lugar, pero no pudieron hablar con nadie. Debido a esta situación, solicitaron a uno de los familiares una llave para inspeccionar la vivienda.
Al entrar se percataron de la presencia de Michele, quien los estaba esperando. La mujer afirmó que no había visto a su madre desde hace varios días.
Sin embargo, luego de que las autoridades registraran la casa, descubrieron el cuerpo de la anciana de 93 años sin vida al interior de un congelador ubicado en el garaje.
Tras el hallazgo, la hija de la víctima fue detenida bajo fianza en la cárcel del condado de Indian River.
Confesión de la hija
De acuerdo con el periódico The Independent, la mujer de 64 años confesó a las policías el hecho y aseguró que lo hizo para seguir cobrando el dinero que recibía su madre producto de su discapacidad.
Según la acusada, ella encontró a su madre muerta sobre su cama y compró el congelador para preservarla y seguir recibiendo su pensión.
En la autopsia realizada al cuerpo de la adulta mayor se reveló que murió por causas naturales al menos dos semanas antes de ser introducida al congelador.