El 18 de junio del año pasado, el sumergible Titan de la empresa de expediciones Ocean Gate hacía implosión a una profundidad jamás definida ni explorada por el ser humano, con al menos cinco personas en su interior, entre ellos su creador, Stockton Rush.
Tras el fatal accidente que estremeció al mundo, la empresa cerró sus operaciones; sin embargo, otra parece seguirle los pasos. Se trata de Triton Submarines, una compañía creada en 2008 de la mano de Patrick Lahey.
Y es que la firma buscaría, en una fecha aún no definida, llegar hasta los restos del Titanic, tal como buscaba hacerlo el Ocean Gate, así lo informó el New York Post.
El viaje en el que se aventurará Triton será abordado por su fundador, además del multimillonario estadounidense, Larry Connor, quien además es astronauta privado certificado por la NASA. De acuerdo al empresario, su objetivo es demostrar que es seguro para la vida humana llegar hasta los casi 4 kilómetros de profundidad, cuando “se tiene un certificado de seguridad”.
“Quiero mostrar a la gente de todo el mundo que, aunque el océano es extremadamente poderoso, puede ser maravilloso y agradable y cambiar realmente la vida si se hace de la manera correcta”, afirmó Connor en conversación con el Wall Street Journal.
La empresa detrás del sumergible desarrolló un dispositivo de 20$ US millones de dólares nombrado “Triton 4000/2 Abyssal Explorer”, la cual, según el multimillonario, podría realizar el viaje repetidas veces.
El submarino lleva más de una década diseñado, sin embargo, no se había podido construir hasta hace muy poco -menos de cinco años- debido a la falta de “materiales y tecnología”, señaló el dueño de Connor Group.
Cabe mencionar que el Ocean Gate carecía de los certificados de seguridad de American Bureau of Shipping y Det Norske Veritas, lo que significó una de las principales críticas en su contra. No obstante, el sumergible de Triton Submarines, sí buscaría pasar este proceso.