El Tribunal General de la Unión Europea denegó a la empresa de ropa deportiva Puma el registro de una zapatilla por no ser inédita, ya que el calzado había sido utilizado por la cantante Rihanna previo a la solicitud.
Según consta en la sentencia del mencionado Tribunal, recogida en Chile por el Diario Constitucional, en el 2014, Rihanna ya era toda una estrella del pop mundial cuando se convirtió en la directora artística de Puma.
La pugna de Puma por registro de zapatillas de Rihanna
Así, en diciembre de ese año la barbadense, compartió imágenes en su cuenta de Instagram donde lucía un par de zapatillas blancas con suela negra, algo que pasó casi desapercibido.
Esto, hasta el 2016, cuando Puma presentó una solicitud a la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (EUIPO) para registrar la propiedad del diseño, la cual, en esa instancia, fue acogida.
Pero 6 años más tarde, o sea, en 2022 la EUIPO anuló el registro a solicitud de una empresa neerlandesa, explicó el citado medio, ya que las imágenes de Rihanna en su red social, salieron a la luz pública 12 meses antes de que se presentara la solicitud de Puma.
Las fotos de las zapatillas en el Instagram, demostrarían que “el diseño carecía de novedad y singularidad al tenor del artículo 4, apartado 1, del Reglamento Nº6/2002”.
Tribunal le dice que no a Puma
La resolución llevó a Puma a intentar impugnar esta decisión ante el Tribunal General de la Unión Europea, aduciendo que “nadie se interesó en el calzado de Rihanna en diciembre de 2014 y, por tanto, nadie se percató del dibujo o modelo anterior”.
Sin embargo, la justicia europea desestimó el recurso y confirmó la resolución. “Las imágenes extraídas de la cuenta de Instagram «badgalriri», difundidas en diciembre de 2014, permiten identificar, a simple vista o mediante una ampliación de estas fotos, todas las características esenciales del dibujo o modelo anterior”.
Agrega que “(…) se deben desestimar las alegaciones de Puma de acuerdo con las cuales nadie se interesó en el calzado de Rihanna en diciembre de 2014 y, por tanto, nadie se percató del dibujo o modelo anterior”.
“En efecto, en diciembre de 2014 Rihanna era una estrella del pop mundialmente conocida. Ello implica que entre sus fans y los círculos especializados en el ámbito de la moda se había despertado, en esa fecha, un interés particular por los zapatos que llevaba el día de la firma del contrato en virtud del cual la estrella se convirtió en la directora artística de Puma”.