Los habitantes del barrio Yungay se preparan para recibir a su nuevo vecino, se trata del presidente electo Gabriel Boric. Este emblemático sector capitalino es conocido por su valor patrimonial y ahora albergará la residencia del próximo mandatario de Chile.
El barrio se encuentra a 30 minutos caminando del palacio de La Moneda y está ubicado entre las calles Sotomayor, Rosas, Santo Domingo y Libertad. Es uno de los pocos sectores que aún preserva antiguas casas de adobe, cités y edificios de diferentes estilos arquitectónicos.
En la zona se encuentran varios restaurantes, tradicionales almacenes de barrio, ferias libres y peluquerías.
Según el portal Memoria Chilena, los terrenos en donde está emplazado el histórico sector pertenecieron a José Portales Larraín, padre de Diego Portales, una inmensa zona rural de 350 hectáreas conocida popularmente como “el llanito de Portales”.
Tras su muerte, los hijos del hacendado vendieron los terrenos donde se construyeron la actual Plaza Yungay, la parroquia San Saturnino y la Quinta Normal de Agricultura.
Al finalizar la guerra contra la confederación Perú-Boliviana, el entonces presidente José Joaquín Prieto celebró el triunfo bautizando al naciente barrio con el nombre de la batalla de “Yungay”, el último enfrentamiento del conflicto bélico.
Las primeras casas que poblaron el sector estaban hechas de adobe, eran de un sólo piso y tenían patios interiores- muy al estilo colonial-. El lugar se convirtió en uno de los primeros barrios en la periferia del antiguo Santiago.
El portal Santiago Región, menciona que el lugar fue planificado por Jacinto Cueto y Juan de la Cruz Sotomayor, y sus primeros habitante fueron familias de un estrato social medio y alto.
El sector se transformó en uno de los barrios típicos de la cuidad de Santiago y fue residencia de varios intelectuales de la época como Amado Pissis, Augusto D’Halmar, Joaquín Edwards Bello, Eusebio Lillo, José Victorino Lastarria, Ignacio Domeyko y Domingo Faustino Sarmiento.
Con el paso de los años, el barrio Yungay comenzó su expansión y en el se instalaron cités y conventillos para albergaron a familias de clase trabajadora.
En 1920, la elite de la zona emigra a lugares más exclusivos de la ciudad. Décadas más tarde, se convierte en un área industrial.
En los últimos años, el barrio se ha transformado en un lugar atractivo para los turistas debido a su gran identidad patrimonial. De hecho, en 2017 la revista National Geographic Traveler lo incorporó dentro de los 21 destinos imperdibles de la lista Best of the world.
Actualmente, el barrio Yungay se caracteriza por sus pintorescas calles llenas de historia y cultura. También, ha tomado fuerza como un polo gastronómico y un lugar para la bohema capitalina.