La semana pasada, el caso del niño australiano Quaden Bayles dio la vuelta al mundo luego que su madre lo grabara llorando por el bullying que sufría en su colegio de Brisbane.
En el registro, el menor de 9 años que sufre acondroplasia, trastorno genético que causa enanismo; incluso dijo que quería suicidarse.
La situación concitó gran atención y el afectado recibió una ola de apoyo de la sociedad local.
En ese contexto, el sábado, Quaden guió a la cancha al equipo de rugby Indigenous All-Stars, en el partido donde finalmente derrotaron a los Maori All-Stars en el estadio Robina de Queensland, con nueve mil personas en las graderías.
El equipo le cursó una invitación oficial para que los acompañara a la cancha, a la que entró con balón en mano ante el apoyo de los jugadores y el aplauso del público.
Con anterioridad, Hugh Jackman, el actor detrás de Wolwerine, publicó un video en sus perfiles oficiales de redes sociales, en el cual afirmó que Quaden podía encontrar un amigo en él.
En la misma línea se manifestó Jeffrey Dean Morgan, actor estadounidense conocido por sus roles en The Walking Dead y en Grey’s Anatomy.