Medios internacionales informaron el insólito caso de la pareja de Kuwait que duró apenas tres minutos felizmente casada. La esposa pidió la nulidad del vínculo debido a que él se burló de una caída que tuvo al salir de la ceremonia.
Según detalla el diario inglés Mirror, en el momento que ella cayó al suelo su esposo le dijo “estúpida” entre risas, por lo que ella se puso furiosa y tomó una decisión drástica.
Así fue como la joven no alcanzó a salir del organismo público donde se habían casado por las leyes de su país (equivalente al Registro Civil chileno), se devolvió hacia donde estaba el juez que había realizado la ceremonia y le pidió que anulara todo lo efectuado.
El novio intentó disuadirla de su determinación, pero ella estaba decidida y nada la hizo cambiar de parecer. El hombre que efectuó el acto aceptó la solicitud de la mujer y el matrimonio quedó sin efecto. Entre el “sí acepto” y la nulidad transcurrieron tres minutos.
De acuerdo al reporte del medio Q8news de Kuwait, el ente no quiso dar a conocer los nombres de la pareja involucrada en el hecho, aunque ya trascendió que este fue el matrimonio más corto de la historia de dicho país.
El citado diario agregó que la mujer recibió varias muestras de apoyo de parte de otras personas en redes sociales, quienes además repudiaron el actuar de su exmarido.
“Un matrimonio sin respeto mutuo está destinado al fracaso, más aún si recién habían comenzado” y “Si él actúa así recién estando casado, es mejor dejarlo”; fueron algunos de los comentarios.
Un caso similar fue informado por medios internacionales en mayo de 2018. En ese entonces, un hombre de Dubai pidió el divorcio de su esposa apenas 15 minutos después de haberse casado.
Según detalla la cadena RT Noticias, todo ocurrió porque el novio consideró un insulto que su suegro exigiera el pago completo de la dote (patrimonio que la futura esposa o su familia entregan al novio) de su hija, teniendo en cuenta que en el arreglo estipulaba que sería en dos pagos.
El monto que ambos tenían acordado era 26.750 dólares (19 millones de pesos), los cuales iban a ser pagados en dos cuotas, pero el padre de la novia comenzó a exigir en malos términos el pago total del dinero, por lo que el joven pidió a sus abogados que realizaran los trámites para anular ahí mismo el vínculo.