Por alguna misteriosa razón, a los seres humano suelen atraernos mucho las cosas prohibidas. Si nos dicen que no hagamos algo, con mayor razón lo queremos hacer. No obstante, hay algunos lugares en el mundo que son tan restringidos, que no importa cuánto lo intentemos, lo más probable es que la mayoría de nosotros jamás logre entrar a ellos.
Uno podría imaginarse que las bases militares son los lugares más salvaguardados del mundo, pero también hay otros sitios donde el acceso de personas está totalmente prohibido, o donde sólo pueden entrar un número muy limitado.
A continuación puedes conocer algunos de los lugares más restringidos del mundo, a los cuales probablemente jamás en tu vida podrás entrar:
Archivos secretos del Vaticano
Los misteriosos Archivos Secretos del Vaticano contienen documentos históricos de hace cientos de años que tienen relación con la Iglesia Católica, y que son resguardados con el propósito de servir al papa y a la Santa Sede.
Si bien en la actualidad se permite que académicos de diferentes religiones accedan a documentos que requieren para sus investigaciones, previa aprobación del prefecto a cargo de los Archivos, el nombre de “secreto” se le otorgó a mediados del siglo XVII, porque en ese tiempo constituían la colección privada del papa y sólo él mandaba sobre ellos.
Fue abierto por primera vez a investigadores que no pertenecieran a la Santa Sede en 1881, por el papa León XIII, explica el sitio web oficial de los Archivos.
Área 51
El Área 51 es una base militar ultrasecreta de los Estados Unidos… y uno de los secretos peor guardados del mundo, porque todos sabían que existía aunque el Gobierno nunca lo reconociera. Recién en junio de 2015 el administrador de la NASA, Charles Bolden, admitió de forma oficial que dicho lugar efectivamente existe.
Antes de eso, habían muchas teorías conspirativas que rodeaban a esta base militar, varias de las cuales tenían relación con que allí se tendría información sobre extraterrestres. Esto fue negado por Bolden en 2015, quien recalcó que “no hay extraterrestres en el Área 51”.
Tras revelarse el secreto, Annie Jacobsen, periodista de investigación y autora del libro Área 51: una historia sin censura, explicó en entrevista con la revista National Geographic que la CIA y el Gobierno de Estados Unidos han desclasificado anteriormente varios documentos sobre la base militar, pero en todos ellos el nombre “Área 51” había sido borrado con tinta para que no fuese posible reconocerlo.
La razón de que se halla intentado ocultar su existencia “sigue siendo un misterio”, indica Jacobsen, pero añade que “yo sostengo que la Comisión de Energía Atómica estaba haciendo programas por ahí en los que se requiere un nivel mucho más alto de control de seguridad y los programas tenían un grado mucho más alto de la clasificación”.
Bóveda Global de Semillas de Svalbard
También conocida como la Bóveda del fin del mundo, es una instalación subterránea que contiene miles de semillas de casi todas las especies de cultivo existentes en el mundo. Fue creada en 2008 en Noruega, y se ubica en la isla de Svalbard, a 1.300 kilómetros del Círculo Polar Ártico.
La estructura debería resistir la mayoría de las catástrofes que pudiesen ocurrir, incluyendo terremotos, inundaciones, erupciones volcánicos y otros.
Se supone que sólo puede ser abierta cuando haya una catástrofe tan grande que amenace a la especie humana… Y, aunque no lo creas, eso ya ha ocurrido: a fines de 2015 la bóveda tuvo que ser abierta por primera vez, debido a la devastación que está dejando la guerra en Siria.
Resulta que en Alepo, capital de Siria, se ubica el Centro Internacional para las Investigaciones Agrícolas en las Zonas Áridas, uno de los 11 bancos mundiales de semillas, y éste tuvo que ser abandonado a su suerte por los científicos en 2012, cuando la guerra amenazaba sus vidas. En dichas instalaciones, que se desconoce en qué estado están, habían 135.000 variedades de cultivos de trigo, granos de haba, lentejas, garbanzo y la colección de cebada más valiosa del mundo, de acuerdo el canal CNN.
Los científicos que trabajaban en Siria sacaron semillas de la bóveda para poder regenerarlas en otras instalaciones y continuar con sus investigaciones, con la promesa de reponer las muestras prestadas en el futuro.
Club 33 de Disney
El Club 33 es uno de los restaurantes más exclusivos del mundo. Fue creado por Walt Disney, quien quería tener un lugar privado para recibir a sus invitados importantes, como celebridades y políticos. Fue inaugurado en 1967 -5 meses después de que muriera su creador, quien nunca llegó a conocerlo-, y se ubica en el parque de Disneylandia en Nueva Orleans, Estados Unidos.
A este restaurante sólo pueden asistir los miembros del club, y es extremadamente difícil unirse. Se rumorea que tiene alrededor de 500 integrantes, mientras cientos de personas están en la lista de espera. Sólo de vez en cuando se abren cupos, y es ahí cuando Disney envía invitaciones para nuevos miembros, explica el portal estadounidense Bussiness Insider.
Quienes quieran unirse deben pagar una cuota de inscripción de 25 mil dólares (16,1 millones de pesos chilenos) y una cuota anual de 10 mil dólares (6,4 millones de pesos). Además, a los integrantes se les prohíbe tener teléfonos móviles en el comedor, y tampoco pueden asistir vestidos con shorts, poleras sin mangas, tops que dejen ver el abdomen ni sandalias.
Cueva de Lascaux
La Cueva de Lascaux se ubica en Francia y contiene muchas de las pinturas prehistóricas más valiosas del mundo. Fue descubierta en septiembre de 1940 por Marcel Ravidat, un adolescente de 17 años, junto a otros tres amigos suyos.
De acuerdo a datos de la revista National Geographic, la cueva tiene unos 80 metros de longitud, y en su interior se hallan 1.963 unidades gráficas, entre pinturas y grabados rupestres. De ellas, 915 son de animales.
Tras el fin de la Segunda Guerra Mundial, la cueva permitía la entrada de turistas, pero duró poco abierta. Debido a que el constante paso de visitantes estaba desgastándola mucho, fue cerrada al público en 1963, y permanece así hasta hoy.
Sin embargo, Francia inauguró en diciembre de 2016 una réplica exacta de la cueva que puede ser visitada en la actualidad.
La Habitación 39
La Habitación 39 es más bien una leyenda, ya que no se sabe con exactitud si existe realmente o no. La razón es que se trataría de una presunta organización ultrasecreta de Corea del Norte, el país más inaccesible del mundo, por lo que es imposible obtener información concreta al respecto.
De acuerdo al diario estadounidense New York Times, lo que se sabe respecto a la organización es que se ubicaría en la llamada Oficina 39, y se encargaría de obtener fondos de dinero para poner a disposición de Kim Jong Un, el líder supremo, con el objetivo de financiar tanto proyectos gubernamentales como lujos personales para el dictador.
Si bien en primera instancia el dinero lo obtendrían desde fuentes legítimas, como exportaciones, se tiene la sospecha de que también estarían involucrados en procesos ilegales, como falsificación de dinero y tráfico de drogas.
La isla de las serpientes
La isla da Queimada Grande, más conocida como Isla de las serpientes o Isla de las cobras, pertenece a Brasil y se ubica a 32 kilómetros de São Paulo, en el océano Atlántico. Está prohibido el acceso de civiles al área debido a un pequeño gran problema: como su nombre lo dice, es una isla llena de serpientes.
Tal como relata el canal Discovery, esta isla tiene una de las mayores concentraciones de serpientes en el mundo: hay cinco por cada metro cuadrado. Y no sólo eso, sino que también en este lugar habita uno de los reptiles más peligrosos: la serpiente cabeza de lanza dorada, o Bothrops insularis.
Éstas pueden llegar a medir hasta 1,18 metros y lo que hace su veneno es quemar la carne y los tejidos alrededor de la picadura. Las otras serpientes relacionadas a su familia son las responsables de causar el 90% de las muertes por picaduras que se registran en América.
Santuario de Ise
El Santuario de Ise es el más sagrado de Japón. En realidad es un complejo que aloja muchos santuarios, algunos de los cuales 91 están conectados al santuario interior, también llamado Naikū, y 32 están unidos al santuario exterior, Gekū.
Se cree que el santuario fue levantado por primera vez hace más de 2000 años, por la princesa Yamatohime-no-mikoto, hija del Emperador Suinin, y una de las particularidades que tiene es que el recinto debe ser reconstruido cada 20 años, debido a la creencia sintoísta de la impermanencia de todas las cosas, relata el portal especializado en Japón Japonismo.
Los turistas pueden visitar partes del santuario, pero la mayoría de las instalaciones están prohibidas para el público. De hecho, hay muchas edificaciones de las cuales los visitantes sólo pueden ver los techos por sobre las cercas que protegen el lugar.
Algunas de las pocas personas a quienes se les permite ingresar a todo el santuario son la familia imperial y el sacerdote o sacerdotisa principal, quien también debe proceder de la Casa Imperial japonesa.