Los gatos son impredecibles, a veces buscan a sus humanos, a veces se esconden. Por eso, a los amantes de los “michis” les pueden surgir dudas sobre cómo tratarlos. De esa manera, puede ser importante saber cómo nos ven, para saber relacionarnos con ellos.
Si tienes un gato, seguramente lo consideras parte de tu familia. Sin embargo, ¿Te ven de la misma forma? Para los “cat lovers”, eso puede ser un misterio, ya que si bien entregan afecto, fidelidad y compañía, no lo hacen de esa forma incondicional que expresan los perros, sino que lo demuestran a su manera, siempre y cuando respetes sus espacios.
Debido a lo anterior, el médico veterinario del equipo de Master Cat, Daniela Soto, comentó algunos datos que te pueden servir para conocer en profundidad a tu gato. Eso puede ser útil para saber relacionarse con ellos.
Si no hablan, ¿cómo nos comunicamos?
Al momento de convivir o interactuar con alguien, es necesario comunicarse. Ahora, al no hacerlo de la misma forma, se van generando dinámicas entre los humanos y sus gatos, con las que van conociendo lo que quiere el otro. Si bien ellos no entienden lo que les decimos, porque no comprenden nuestro lenguaje, son capaces de leer los gestos o acciones que hacemos.
“Por ejemplo, si le digo ‘michi, a comer’ y tomo la bolsa de alimento, él ve eso, que es hora de comer, pero no es que nos entiendan por la forma como hablamos, van aprendiendo por los gestos y acciones que repetimos en cada momento que les hablamos”, indicó el médico veterinario.
De igual manera, los “michis” nos transmiten lo que quieren, lo que no les gusta y lo que les agrada mediante gestos. A pesar de ser minimalistas con sus actitudes, son animales expresivos.
“La forma más común en que los gatos se comunican con nosotros es a través de sus gestos corporales y maullidos. Todo dueño de gato sabe que hay distintas actitudes que hace, que podemos interpretar con lo que necesitan. Lo mismo pasa con los maullidos, según el sonido, duración y frecuencia, vamos aprendiendo qué significado tienen y nos vamos relacionando en un día a día”, apuntó Soto.
Ronroneos, mimos y regalos
A su manera, los gatos son seres cariñosos. Si quieren a alguien, se lo hacen saber a sus tiempos, siempre desde la independencia, respetando los espacios de cada uno.
El médico veterinario de Master Cat aseveró que “tienen varias formas de transmitir el cariño. La más común es el ronroneo, que si te fijas no lo hacen con todos los humanos, solo con los que sienten un apego especial, así también pueden manifestar momentos de cariño hacia nosotros cuando pasan tiempo a nuestro lado, ya sea acostado en tu cama, al lado mientras trabajas, pasando momentos en que se quiere acostar encima de ti”.
Asimismo, al ser animales cazadores por naturaleza, los gatos pueden mostrar su afecto de una manera particular: llevando animalitos o insectos cazados. Si bien ello puede espantar a los humanos, Soto explicó que las intenciones son desde el amor.
“Cuando nos traen alguno que otro regalo como una presa, si bien eso a nosotros nos parece de lo peor, es una forma de entregar algo que ellos cazaron para poder compartirlo. En la naturaleza se da mucho, la madre caza y lo comparte con la familia, por lo tanto, algo que para nosotros puede ser muy raro, especial e incluso mal visto, para ellos es una forma de mostrar que somos importantes y por eso el regalo de algún animalito que cazó”.
Nos ven de igual a igual
¿Has pensado cómo te ve tu gato? Son cariñosos, hostiles, pueden amarte e ignorarte de un momento a otro, querer jugar o esconderse. Eso puede generar dudas sobre cómo tratarlos o qué percepción tienen de ti.
Esto ha impulsado diversos estudios y teorías. Sin embargo, los expertos apuntan que nos ven como parte de su manada, es decir, desde una perspectiva de relación horizontal.
“Los gatos nos ven como uno más de su clan, por eso mismo nos tratan de igual a igual y no sienten esa compasión o admiración incondicional como lo hace un perro. Ellos dicen, ‘me tratas bien, me das alimento, un lugar para dormir, te trato bien’, pero de lo contrario no tiene problemas en defenderse”, puntualizó Daniela Soto.
No exponerlos a olores intensos
Los “michis” pueden ser temperamentales. A veces se alejan, gruñen o rasguñan sin una razón aparente. Si bien los motivos pueden ser diversos, Daniela Soto reveló algo que puede activar su molestia.
“En temas de olores, son muy sensibles a productos con olores intensos, por eso, no deberíamos exponerlos a ellos, para no generarles un mal rato. Dentro de estos olores está la cebolla, el vinagre, limón, pomelo, etc., olores en general que sean ya fuerte para nosotros, para ellos son aún más. La recomendación es conocer a nuestro gato, hacer cosas que le agraden y evitar aquellas que le molesten para no salir con un arañazo gratis.
Bonus: ¿Tienen 7 vidas?
Gran parte de las personas ha escuchado -o conocido- de gatos que han sobrevivido a situaciones extremas, como cuando caen de edificios, escapan de perros agresivos o de autos que van a gran velocidad. Aquello ha sostenido el dicho milenario: “los gatos tienen 7 vidas”.
Según Soto, eso se debe a que tienen un sentido de equilibrio sumamente desarrollado, que les permite que, por instinto, su cuerpo pueda actuar rápidamente ante situaciones de peligro, cayendo la mayoría del tiempo parados.
“Los gatos en su oído interno tienen su sistema vestibular desarrollado, el cual les permite mantener el equilibrio, donde frente a un caída, se activa y hay todo un movimiento interno del líquido vestibular que indica que hay una pérdida del centro de gravedad, lo que permite al gato actuar rápidamente y volver a su posición normal que es con las 4 patas hacia el suelo”, apuntó el médico veterinario.
“Pero no pongas a prueba a un gato para ver si gira, porque aunque él se dé vuelta y llegue a la posición de pie, podrían haber lesiones graves internamente dependiendo de la altura que cayó”, advirtió Soto.