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La instauración de comunas en cuarentena desde el inicio de la emergencia sanitaria por la pandemia por coronavirus ha generado que las personas deban cambiar y reinventar sus estilos de vida para evitar salir.
Sin embargo, en el caso de los permisos que se adquieren desde la Comisaría Virtual, han habido algunos cambios, los que incluyen una franja horaria para ser deporte y la eliminación del permiso inicial para paseo de mascotas.
Esto último ha generado dudas sobre cómo influye esta alteración de rutinas en los perros, sobre todo en aquellos que viven en departamento y que en muchos casos, la cuarentena total tampoco permite el uso de espacios comunes.
Actualmente, las autoridades han destinado dicha banda horaria deportiva para el paseo de mascotas, ya que no es necesaria el uso de un permiso, por lo que puedes pasearlos desde las 5:00 a 9:00 horas en comunas en Cuarentena, mientras que los sábados, domingos y festivos va de 5:00 a 10:00 horas en comunas en Cuarentena y Transición, según se ha indicado desde el programa Elige Vivir Sano.
No obstante, en el caso de los perros el paseo no sólo significa el momento en el cual puedan hacer sus necesidades, sino que también es un momento de recreación e interacción con otras personas y perros.
En conversación con Biobiochile, Ana Francisca Soto, etóloga y vocera del Colegio Médico Veterinario de Chile, explica que la alteración de rutinas en los perros puede causar cambios emocionales, generando cuadros de estrés y ansiedad.
“Los perros necesitan tener rutinas establecidas y en esas mismas rutinas deben tener actividades que les permitan gastar su energía y los estimulen, sobre todo cognitivamente. El tema de los paseos es fundamental para ellos, porque tienen lo que se llama la ‘exploración’, donde ellos olfatean, reconocen otros estímulos que en las casas no tienen, sobre todo en departamento”, agrega la especialista.
Incluso, si tuvieran patios grandes, los perros necesitan explorar otras cosas, ya que son una especie social, por lo que necesitan el contacto con otras personas y animales.
Algunas posibles soluciones
La especialista señala que algunas cosas que se pueden realizar en este periodo para los perros se sientan más relajados y poder contrarrestar los efectos de esta interrupción de su rutina, es hacer actividades dentro de la casa.
“Se pueden practicar trucos de entrenamientos, al menos unos 15 minutos, ayuda a mejorar el vínculo con el tutor, la comunicación, y además, cualquier ejercicio que lo haga pensar, va a gastar también su energía”, sostiene la etóloga.
Además, agrega que también se pueden utilizar juegos cognitivos, que incluyan buscar cosas, olfatear, poner la comida en juguetes. “Se puede aumentar el juego si le gusta perseguir pelotas y los juegos interactivos son una muy buena alternativa de incluirlo en la rutina, y aunque los paseos sean más cortos, incluirnos de igual manera, sobre todo para aquellos perritos que los usan para ir al baño”.
La especialista también comenta que dentro de las nuevas normas se han olvidado de los paseos o rutinas de mascotas, sobre todo de las que viven en departamentos, por lo que insta también a utilizar la banda deportiva para los paseos.
Sin embargo, otra pregunta que puede inquietar a quienes residan en edificios, es qué pasa con los espacios comunes, sobre todo si necesitas pasear a tu mascota o alguna otra actividad recreativa.
Luis Bustamante Robin, profesor de Derecho Civil de la Facultad de Derecho de la Universidad Finis Terrae, explica que “el comité de administración, el conserje, los guardias o los mismos vecinos, no tienen las facultades o potestades para limitar el ejercicio de los derechos de otros, ya que ninguno de ellos representa a la autoridad”.
“Las restricciones relativas al uso de los espacios comunes de los edificios están dadas por lo que establezca el Reglamento de Copropiedad, y frente a la transgresión del mismo se podrán imponer multas. La restricción no emana entonces de la voluntad unilateral de la administración, ya que carece de esta facultad”, puntualiza.
El abogado aclara también que el uso de espacios comunes en edificios, tendrá relación con aforos máximos, implementación de turnos para su uso y para la sanitización. Lo anterior obedece a toda lógica de convivencia.
“Para el uso de los espacios comunes o restricciones de los mismos, como por ejemplo, de paseo de mascotas, habrá que estar a lo que diga el reglamento de copropiedad. Las potestades para multar están dadas por dicho reglamento”, dice Bustamante.
“La libertad ambulatoria no puede ser restringida por voluntad unilateral de la administración, carecen de las potestades para hacerlo, y si el reglamento contiene una restricción, bueno, el mecanismo sancionatorio será el que establezca dicho reglamento”, sostiene.
Sobre la prohibición de estos espacios, el abogado enfatiza en que “uno debe ajustarse a las normas de uso de los espacios comunes, establecidas en el Reglamento de Copropiedad, y en caso contrario acatar las sanciones que puedan derivar del incumplimiento de las normas fijadas en dicho Reglamento. Así como no pueden impedirme el ejercicio de mi derecho, yo no debo impedir el legítimo derecho de otros copropietarios sobre los bienes de uso común, todo ellos según las normas del Reglamento de Copropiedad”.
Pese a lo anterior, Bustamante también puntualiza en la importancia de los informativos en cada edificio, con el fin de mantener al tanto a cada residente sobre los cambios o nuevas implementación que atañen a toda la comunidad.
