Sectores rurales de la región de Nueva Gales del Sur en Australia viven una de las peores plagas de ratones que se hayan registrado en la historia. La situación se da luego de la temporada de cosechas que se registró en la zona.
En los últimos días, residentes del pueblo de Gilgandra grabaron y publicaron series de videos que muestran a los animales recorriendo los campos en busca de comida.
De acuerdo a la cadena Australian Broadcasting Corporation, es frecuente que el número de roedores aumente durante el fin de la temporada de verano, aunque este año el incremento ha sido explosivo y peligroso.
Sin ir más lejos, aseguran, sólo un par de hembras de estos grupos pueden engendrar un total de 500 crías en un lapso corto de tiempo, lo que hace el problema aún más complejo.
“Por la noche el suelo se mueve con miles y miles de ratones corriendo”, indicó un agricultor llamado Ron McKay al citado medio.
La situación sanitaria se ha vuelto sumamente difícil, por lo que supermercados han tenido que almacenar los alimentos en contenedores sellados, para evitar que los ratones ingresen.
A eso se suma que tres personas han llegado al hospital debido a que han sido mordidos por los animales.
“¿Puedes imaginar que cada vez que abres un armario o cada vez que vas a tu despensa, haya ratones presentes?”, indicó Steve Henry, un experto local en plagas.
“Están comiendo en tus recipientes de comida, están ensuciando tu ropa de cama limpia en tu armario de ropa, están corriendo por tu cama por la noche”, añadió.
Por ahora, los residentes reconocen que las fumigaciones y exterminio por medio de trampas no han tenido un gran efecto, por lo que muchos juegan sus fichas a las lluvias de otoño, las cuales podrían ahogar a los ratones en sus madrigueras.