Cuatro elefantes, con adornos de Viejo Pascuero y mascarillas gigantes, desfilaron el miércoles en su visita anual a un centro escolar en Tailandia.
Los paquidermos Sri Mongkon, de 14 años, Sri Raya, de 6, Peter, de 15 y King Kaew, de 18, transportaban en sus trompas cestas con mascarillas para distribuir entre los alumnos y las familias en el exterior de la escuela Jirasat Wittaya de Ayutthaya, a una hora de Bangkok.
Los niños cantaban villancicos y se hacían fotografías con los animales.
Para Brett Baxter, profesor de inglés y ciencias, el acto tenía como objetivo promover el espíritu navideño, con un toque tailandés.
“Es fantástico para los niños. Mezcla dos culturas, la de Navidad, con el Papá Noel y la alegría que trae… y la de Tailandia, con los elefantes”, explicó a la AFP.
“Están muy bien entrenados y cuidados. Conocemos estos elefantes desde hace muchos años”, añadió.
Ayutthaya, la antigua capital del reino de Siam, es considerada como la cuna de la comunidad cristiana en Tailandia. Misioneros católicos europeos construyeron en esta ciudad una iglesia a orillas del río Chao Phraya hace tres siglos.
Los niños de Ayutthaya reciben la visita de estos elefantes vestidos de Papá Noel desde hace 17 años, recordó el director del centro de elefantes de Ayutthaya, Ittipan Paolamai.
“Este año, debido a la pandemia (…), hemos aprovechado esta ocasión para sensibilizar al público sobre la propagación del covid-19”, declaró a la AFP.
Pero algunas ONG critican estos espectáculos en las escuelas, una actividad “muy cuestionable e inaceptable”, según Jan Smith-Burbach, veterinario y miembro de la Sociedad Mundial para la Protección de los Animales (World Animal Protection), contactado por videoconferencia.
“Presentan a los niños un panorama totalmente erróneo de estos animales complejos que son una especie en peligro. Se convierten en bufones y payasos, cuando en realidad son animales salvajes”, declara.