Un aspecto desconocido de los incendios forestales que afectan a la zona centro sur del país, tiene relación con la vida silvestre que quedó hecha cenizas tras su paso. La seguidilla de focos de fuego ha perjudicado directamente el hábitat natural de los animales que deambulan en bosques y zonas forestales, algo que los ha obligado a migrar a otros lugares. Es el caso de los marsupiales chilenos.
En este contexto, el arribo de estos a las urbes aledañas, escapando del fuego y del trabajo de bomberos y brigadistas en sus terrenos, es común bajo estas circunstancias. Por lo mismo, diversos grupos animalistas han advertido la eventual llegada de marsupiales chilenos a las casas que limitan con las zonas incendiadas: especies protegidas que en muchos casos son beneficiosas en la actividad humana.
El miedo a que los habitantes los confundan con ratones y los ahuyenten o hasta los maten, ha motivado a organizaciones como Historia y Naturaleza a publicar instructivos para reconocerlos y salvarlos. A continuación, algunos datos prácticos a tener en cuenta para no confundirlos si nos topamos con ellos.
Yaca (Thylamys elegans):
-Orejas largas desprovistas de polo.
– Endémica de Chile (Coquimbo a Valdivia).
– Cola prensil.
– Calificada como Rara por el Reglamento de Clasificación de Especies.
Monito del Monte (Dromiciops gliroides)
– Orejas pequeñas
– Es el marsupial de mayor tamaño en Chile
– Presente desde la VIIi a la X región.
– Estrechamente relacionado con los marsupiales de Australia.
– Clasificada como Casi Amenazada en el Reglamento de Clasificación de Especies)
Comadrejita Trompuda (Rhyncholestes raphanurus)
– 40% de su longitud corresponde a la cola.
– Pelaje uniformemente castaño o gris oscuro.
– Carece de marsupio.
– Cola no prensil
– Clasificada como Vulnerable en el Reglamento de Clasificación de Especies.
Yaca del Norte (Marmosa de la Puna)
– Orejas más prominentes que las de la Yaca común.
– Cola prensil
– Habita en Chile, Bolivia, Perú y Argenrtina.
– Nombre científico: Thylamys pallidior
– Beneficiosa para la actividad silvoagropecuaria, cuenta con densidades poblacionales reducidas y beneficia la mantención del equilibrio de los ecosistemas naturales.
Según información que proporcionó el Servicio Agrícola y Ganadero a BioBioChile, estas cuatro especies están protegidas por el artículo 4° del reglamento de la Ley de Caza 19.473. ¿Qué quiere decir la medida? Queda prohibida su caza y captura en todo el territorio nacional.
Si los ves, contacta al SAG en el teléfono 600 81 81 724. Desde celulares: +56 2 2345 1100.
Historia y Naturaleza