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Las celebraciones de Año Nuevo suelen venir acompañadas de excesos en la comida y en el consumo de alcohol, lo que lleva a muchas personas a descuidar su ingesta de calorías. Si bien algunos se preocupan por controlar lo que comen durante la cena, es importante considerar también las calorías de los cócteles y tragos alcohólicos, sobre todo para aquellos que planean beber más que solo en el brindis de medianoche. Según nutricionistas, lo ideal es optar por vinos, espumantes y cervezas, preferiblemente en su versión light, ya que a mayor graduación alcohólica, mayor aporte calórico. En el caso de los espumantes, se recomienda elegir los tipo Brut Nature con menos azúcar, mientras que para los destilados, el gin y el vodka son las opciones más bajas en calorías. En cuanto a la piscola, se alerta que contiene 210 calorías en 100 ml, por lo que puede ser una elección menos saludable. Para disfrutar de bebidas alcohólicas sin culpas, se sugiere combinar gin con tónica sin azúcar y vodka con soda y un poco de jugo de limón.

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Las celebraciones de Año Nuevo suelen estar asociadas a un montón de comida, e igual abundancia en consumo de alcohol.

Producto de la alegría y emoción del momento, muchas personas descuidan poner atención a su alimentación en términos de calorías.

Y es que, si bien, hay quienes se enfocan netamente en cuidarse respecto a lo que ingieren durante la cena de la víspera de Año Nuevo, también hay que contemplar las calorías de los cócteles y otros tragos con base alcohólica.

Sobre todo para quienes contemplan beber más que el brindis de la medianoche.

¿Qué tipo de alcohol es más sano consumir en Año Nuevo?

En el instante previo a descorchar una botella o abrir una lata, hay que hacerse la idea de que un gramo (un mililitro) de alcohol aporta siete calorías.

Además del aporte calórico dado por los propios ML de una copa -o una botella-, también hay que considerar los grados alcohólicos e ingredientes que puedan añadirse a un cóctel, que poco a poco irán agregando azúcar y calorías dependiendo de cuántos sean.

Hace algunos meses, la nutricionista y profesora de la carrera de gastronomía en el Centro de Formación Técnica de la Universidad Católica del Norte (CEDUC), Patricia Zambrano, comentó a BioBioChile que “mientras mayor graduación alcohólica tenga (el trago), mayor va a ser el aporte de calorías“. Por ello es que la recomendación es preferir vinos, espumantes y cervezas; estas últimas idealmente en su versión light.

En cuanto a los espumantes, que nunca pueden faltar al momento del brindis para recibir el Año Nuevo, el llamado es inclinarse por los de tipo Brut Nature, que tienen menos gramos de azúcar (hasta 3 por litro).

Otras alternativas son los vinos secos, que tienen menores aportes calóricos en comparación al vino común, con una diferencia de unas 60 calorías por copa.

¿Qué pasa con los destilados?

Si los destilados son lo tuyo, el gin y el vodka son los que tienen una menor cantidad de calorías, consigna 24Horas ¿Qué pasa con la piscola? La tradicional preparación chilena podría ser una mala idea para quienes se están cuidando, puesto que el pisco tendría 210 calorías en 100 ml, a lo que hay que sumar la bebida.

Para preparados con gin, se recomienda la tónica sin azúcar. En tanto, el vodka, que generalmente es mezclado con otros ingredientes y puede resultar en un cóctel calórico, las sugerencias apuntan a beberlo con soda y “un poquito de jugo de limón y rodajas de este”, señaló una especialista al medio.