Con el final de diciembre acercándose rápidamente, Chile se prepara para despedir el año 2024 con una serie de tradiciones y cábalas que ya son parte de la cultura popular para cada Año Nuevo.
Desde la suerte hasta el amor, pasando por la prosperidad económica, los chilenos se preparan para recibir el 2025 con rituales que han sido parte de generaciones.
Mientras el mundo celebra de muchas maneras, en Chile, cada uva, paso dado con una maleta y grano de lenteja llevan consigo deseos de un nuevo año mejor. Así, varias de ellas son nombradas por la fundación Imagen de Chile, agencia de la marca país —Marca Chile— cuya misión es promover la imagen de Chile en el mundo.
Tradiciones y cábalas de Año Nuevo que se realizan en Chile
1. Las 12 uvas de la suerte
Una de las tradiciones más arraigadas en Chile durante la víspera de Año Nuevo es comer doce uvas a la medianoche, una de las cábalas que también se observa en otros países hispanohablantes, tiene sus raíces en España, donde se come una uva por cada una de las 12 campanadas a las 12 de la noche, y fue adoptada en Chile hace varias décadas.
De acuerdo a National Geographic, se dice que cada uva representa un mes del año, y comerlas al ritmo de las campanadas asegura prosperidad y suerte para cada uno de esos meses.
2. Maleta en mano para un año de aventuras
Otra práctica común entre los chilenos es dar una vuelta a la manzana con una maleta justo después de medianoche. Quienes participan en esta cábala esperan que el gesto simbolice y atraiga un año lleno de viajes y nuevas experiencias.
La costumbre mencionada también la llevan a cabo en otros países de Latinoamérica, como Argentina y Perú, acorde a lo recogido por Infobae.
3. Dinero en el zapato para la prosperidad económica
Colocar dinero dentro del zapato derecho es una cábala que muchos chilenos practican durante las celebraciones de Año Nuevo. Este acto busca asegurar la prosperidad económica y la estabilidad en el nuevo año.
Aunque no se conoce un origen específico de esta práctica, se refleja en varias culturas con distintas variantes, adaptándose localmente con características propias. De hecho, también fue adoptada de España.
4. Lentejas en la cena de Año Nuevo
Las lentejas son un elemento indispensable en las mesas chilenas la noche del 31 de diciembre. Comer lentejas, especialmente al inicio de la cena, se considera un augurio para un año nuevo lleno de trabajo y oportunidades económicas.
La mencionada cábala también tiene influencias europeas, pero en Chile, se ha convertido en un símbolo de deseos de abundancia y prosperidad laboral.
5. Ropa interior amarilla
Muchos chilenos optan por usar ropa interior amarilla durante la víspera de Año Nuevo. Este color, que simboliza la felicidad y buena suerte, es esencial para asegurar un año venidero lleno de alegrías y éxitos.
Cabe señalar que en Chile, la tradición indica que la ropa interior amarilla debe ser regalada. No obstante, otros plantean que debe ser usada al revés para asegurar un año con mayor pasión.
“Más que con los calzones amarillos, la tradición tiene que ver con el color”, explicó en 2016 a la agencia de noticias AFP el escritor Héctor Velis-Meza, autor del libro “La historia secreta de la Navidad y el Año Nuevo”.
En su texto, se plantea que aunque el amarillo normalmente se ha asociado a la mala suerte, en este caso hace referencia al Sol, que representa la eternidad.
6. Anillos en la copa de espumante
Para aquellos que buscan amor y compromiso en el año que comienza, colocar un anillo, especial ente de oro, en la copa de espumante o sidra durante el brindis de medianoche es una cábala común.
Se cree que esto atrae matrimonio o fortalece relaciones existentes, simbolizando la unión y el deseo de continuidad en el amor.
7. El Cordero de Año Nuevo
En varias regiones de Chile, especialmente en el sur, si bien no es una cábala, es tradicional preparar cordero el 1 de enero.
De hecho, está tan arraigado ya la población local que las autoridades realizan avisos y entregan consejos para que no sucedan incidentes.
8. Quemar un papel o un muñeco
Este rito, que es toda una costubre de las regiones del norte de Chile, consiste en escribir en un papel todo lo que se desea dejar atrás para luego quemarlo. A esto se le llama “quemar el año viejo”.
También está la costumbre en la que se arma un muñeco del tamaño de la persona y se viste de pies a cabeza. Incinerarlo simboliza dejar todo lo malo atrás y dar paso a nuevos comienzos.
¿Por qué creemos en la supersticiones y cábalas de Año Nuevo?
Al menos en Chile, todo comenzó con la evangelización durante la conquista española, época que estuvo marcada notoriamente por las creencias católicas.
Tal como explica el portal Memoria Chilena, a partir de este momento “se desarrollaron una serie de cultos y sistemas de creencias que no siempre encajaban con el modelo religioso impuesto por la autoridad eclesiástica”.
Ya durante el siglo XIX y XX las supersticiones fueron combatidas, ya que se consideraba que “impedían la difusión de un pensamiento científico y racional en los sectores populares”.
Generalmente la creencia en fenómenos irracionales tiene relación con alguna experiencia negativa. Hay quienes creen que la superstición entrega una sensación de control, minimizando la ansiedad.
Una investigación publicada en Alemania en 1982 reveló que las supersticiones aumentan durante las situaciones adversas. En ese sentido, agrega, pueden ser positivas, ya que ofrecen la oportunidad de adoptar otra mentalidad diferentes ante la vida, y así tener otra actitud.