El bloqueador solar es uno de los aliados más importantes en el cuidado de la piel, pero su uso adecuado va más allá de aplicarlo una vez al día.
Gracias al constante trabajo de la comunidad dermatológica, en los últimos años se ha logrado que las personas tomen mayor atención por el cuidado de su piel. Antes se veían casos de cáncer de piel avanzados con mayor frecuencia; ahora se detectan cada vez casos más tempranos.
A pesar de ello, aún persisten algunas dudas sobre el uso del bloqueador solar, como la frecuencia con la que debe ser reaplicado y si cada tipo de piel debe utilizar un bloqueador diferente.
Los problemas de no usar bloqueador solar
Los dermatólogos coinciden en que el uso regular de bloqueador solar sigue siendo una de las medidas más eficaces para prevenir el daño solar, el envejecimiento prematuro de la piel y el riesgo de cáncer de piel.
Así también coincide el médico dermatólogo, Aldo Gálvez, quien comentó a nuestro medio asociado, RPP Noticias, la importancia de usar protector en el rostro, pues es una zona que está expuesta al sol todos los días del año, ya sea verano o invierno. Sostiene, además, que hay varios tipos de radiación solar que llegan a nuestra piel, como la ultravioleta A, la ultravioleta B (muy vinculada al cáncer de piel) y la luz visible.
Por ello, es fundamental que las personas que pasan varias horas expuestas al sol procuren utilizar mangas para los brazos y lentes de sol para el cuidado de la retina. Asimismo, deben tener mayor cuidado entre las 9:00 y 15:00 horas.
Asimismo, indicó que cada tipo de piel puede beneficiarse de un bloqueador solar diferente, ya que las características y necesidades de cada tipo de piel varían. Por ejemplo, para las personas con piel seca se recomienda un bloqueador solar con ingredientes hidratantes. En cuanto a las personas con piel grasa, pueden optar por bloqueadores solares libres de aceites y preferentemente en gel o base acuosa.
¿Cuántas veces hay que reaplicarlo?
Por otra parte, para aquellos que pasan mucho tiempo bajo el sol, se les recomienda reaplicar el bloqueador cada dos horas como mínimo.
“Si me meto al mar también tengo que replicármelo por más que sea resistente al agua. Si estoy en oficina, tal vez podría considerar aplicarlo cada 3 horas, porque estoy menos expuesto a que el bloqueador se salga. La tecnología actual del bloqueador hace que uno se lo pueda echar encima y que no necesariamente tenga que lavarse el rostro para usarlo”, enfatizó Gálvez.
De acuerdo con el dermatólogo, probablemente todos los tipos de piel necesiten una muy buena protección contra el ultravioleta A. “La gran ventaja de los bloqueadores actualmente es que han tenido una mejor protección contra el ultravioleta A”, puntualizó. No obstante, si la persona quiere protegerse de la luz visible por un tema de manchas, debe usar un bloqueador con color.
¿Qué pasa con los maquillajes con protector solar?
Respecto al maquillaje con protector solar, el dermatólogo pide revisar cuidadosamente sus componentes en la etiqueta, pues generalmente tiene factores de protección solar relativamente bajos, es decir, no protege de forma tan eficaz contra el ultravioleta B.
Estos productos son una alternativa más útil para quienes se queden en un lugar que no esté expuesto al sol. “Pero para un día de playa definitivamente no es una buena idea”, recalcó.
¿Desde qué edades se recomienda el bloqueador solar?
Cabe precisar que los protectores solares se pueden empezar a utilizar a partir de los 6 meses de edad. Hay protectores solares especiales para usar entre los 6 meses y 3 años y hay otros para usar durante la edad pediátrica. Sin embargo, algo muy importante que se debe mencionar es que dicho producto no exime al menor a exponerse a “todo lo que quiera”.
“La responsabilidad de no exponernos a las horas en las que es más fuerte la radiación solar es determinante. Los niños por debajo de los dos años son muy susceptibles a la radiación solar y pueden recibir daño en su piel que, en los dos o cinco primeros años de vida no traiga problemas, pero en la adultez sí”, acotó el experto.