Que te pidan la propina cuando no corresponde puede ser una situación bastante incómoda para algunas personas. Si bien se trata solo de una sugerencia, existen instancias en las que la presión social puede hacer que se entregue este dinero extra, aun cuando la ley no lo contempla.
Si bien la ley ya define en qué lugares y situaciones los comercios están autorizados (y obligados) para pedir propina, un nuevo proyecto de ley busca reforzar esto, estableciendo la responsabilidad en el empleador para cautelar que trabajadores no pidan propina cuando no corresponde. ¿En qué casos me pueden pedir propina y en qué cambiaría la ley actual?
En qué lugares te pueden pedir propina
Según el artículo 64 del Código del Trabajo, los únicos lugares o circunstancias en las que se considera que el personal pida propina son los establecimientos que atiendan público a través de garzones, tales como:
Restaurantes
Pubs
Bares
Cafeterías
Discotecas
Fondas
Otros similares
De hecho, la norma contempla que, en estos lugares, el empleador está obligado a que se sugiera, en cada cuenta de consumo, el monto correspondiente a una propina de a lo menos el 10% del mismo, la que deberá pagarse por el cliente, salvo que este manifieste su voluntad en contrario.
No obstante, en la actualidad existen otro tipo de locales comerciales, tales como peluquerías, barberías o establecimientos de comida con atención en barra o mesón, que también piden propina a sus clientes.
¿Qué dice el nuevo proyecto de ley sobre las propinas?
Al respecto, el nuevo proyecto de ley busca prevenir que este tipo de prácticas se sigan perpetuando, sosteniendo que es responsabilidad del empleador proteger los derechos laborales y evitar ambientes de competencia o situaciones de abuso donde empleados sean obligados a pedir propinas al no recibir una compensación justa.
“Esta medida promueve la equidad, el respeto a los consumidores, protege los derechos de los trabajadores y contribuye a mantener la calidad y la reputación del servicio ofrecido por el establecimiento”, señala el documento firmado por el diputado Víctor Pino (Demócratas).
En concreto, este busca modificar el mencionado artículo 64 del Código del Trabajo, agregando el siguiente inciso segundo:
“Tanto en los establecimientos señalados en el inciso precedente, como en todo aquel en el que no exista o no se requiera atención a público a través de garzones, el empleador deberá tomar las medidas necesarias para que sus empleados no procedan a incomodar a los clientes que asistan a dicho establecimiento solicitando o sugiriéndole otorgar propina por el servicio recibido. En el caso de que el empleador no tome las providencias para evitar dicha acción, será sancionado con una multa a beneficio fiscal de tres a cinco unidades tributarias mensuales”.
¿De cuánto son las multas?
El empleador estará obligado a tomar medidas para evitar que sus trabajadores pidan propinas cuando no corresponde. De lo contrario, se le aplicará una multa que va de tres a cinco unidades tributarias mensuales (entre 200 y 330 mil pesos aproximadamente).
Cabe mencionar que este proyecto aún se encuentra en primer trámite constitucional en la Cámara de Diputados, por lo que podría sufrir eventuales modificaciones durante su tramitación.