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El refrigerador destaca como el electrodoméstico de mayor consumo energético en un hogar debido a su constante funcionamiento para mantener bajas temperaturas y preservar los alimentos. No obstante, se revela que el "consumo vampiro" o "consumo fantasma" es una fuente discreta pero significativa de gasto energético, especialmente a través de los televisores inteligentes o "smart TV", que consumen entre 0,5 y 3 vatios estando apagados, representando hasta el 5% de su consumo encendidos. Este consumo se debe a actualizaciones y conexiones constantes a Internet. Para evitar este gasto innecesario, se recomienda desenchufar el televisor cuando no se esté usando, reducir el brillo de la pantalla, activar el modo de ahorro de energía si está disponible y considerar el tamaño del televisor, ya que los de mayor dimensión requieren más energía para encender todos los píxeles.

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El refrigerador es el electrodoméstico líder en consumo de energía al interior de un hogar, considerando el esfuerzo técnico por mantener bajas temperaturas, y la demanda energética por estar conectado 24/7.

Ello no es sorpresa para nadie, puesto que es la única forma de mantener los alimentos para que no se pudran con facilidad. Sin embargo, hay un aparato que también es un gran consumidor de energía eléctrica, que de seguro desconocías que lo hacía por su discreta ejecución.

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Ese silencioso gasto energético es lo que se conoce como “consumo vampiro” o “consumo fantasma”, y que se refiere a esa utilización “invisible” de la red eléctrica cuando los dispositivos están apagados, mas no desenchufados, indica el PhD en Ciencias de la Ingeniería de la Pontificia Universidad Católica de Chile, Sebastián Lira.

El electrodoméstico que consume energía estando apagado

Los llamados a desenchufar electrodomésticos que no se están utilizando no es antojadizo, y es que el televisor es el aparato que más consume energía estando apagado o en modo de espera.

De acuerdo a Infobae, los televisores inteligentes o “smart TV” mantienen funciones cuando están apagados, pese a que no se esté utilizando la pantalla.

Un televisor apagado consumiría entre 0,5 y 3 vatios y, hasta el 5% de la energía que usaría estando encendido. Pese a que en el gran listado de aparatos que hay en un hogar pueda resultar un consumo menor, estando enchufado por varias horas al día se acumula el gasto.

El citado medio señala que el gasto energético ocurre a través de descargas de actualizaciones de aplicaciones y del sistema operativo del televisor. El modo de espera, que permite al aparato encenderse rápidamente al usar el control remoto, también contribuye al gasto. Además, la constante conexión a Internet de los “smart TV” es un factor a considerar en el consumo.

Con todo lo mencionado, las recomendaciones para no caer en un consumo de energía innecesario en los electrodomésticos, que a la vez que permite al ahorro, apuntan a lo siguiente:

  • Desenchufar el televisor mientras no se esté utilizando.
  • Bajar el brillo a la pantalla.
  • Utilizar el modo de ahorro de energía, en caso de que el dispositivo cuente con uno.
  • Considerar el tamaño, los televisores de mayor dimensión utilizan más energía para encender todos los píxeles.