Este viernes 2 de agosto es el Día Internacional de la Cerveza, fecha que se celebra desde 2007 para rendir tributo a esta popular bebida.

En Chile, el mercado de la cerveza es bastante joven. Los primeros indicios de producción se remontan a la segunda década del 1800, cuando se consolidó la independencia chilena y se abrió al comercio con Europa, que trajo además consigo la llegada de inmigrantes ingleses y alemanes.

El consumo y la cultura cervecera se esparció a lo largo del país, principalmente en las ciudades con mayores concentraciones de europeos, como Valparaíso, Valdivia y Santiago, naciendo un gran número de fábricas en diversas ciudades desde mediados del siglo XIX.

Junto con las inestabilidades políticas y económicas de Chile a finales del siglo, los productores cerveceros se fueron consolidando al alero de una única compañía. Esta situación se mantuvo durante todo el siglo XX, el que también estuvo marcado por la creación de Malterías Unidas (hoy Maltexco) en 1916, principal proveedor de cebada malteada y productos derivados para la fabricación de cerveza.

Con la llegada del siglo XXI, la situación nacional evolucionó de la mano del auge económico. Emprendedores en varias regiones del país, decidieron aventurarse con la producción de cervezas, ampliando de este modo fuertemente la oferta de variedades y estilos, lo que impulsó el consumo y la cultura cervecera.

Actualmente, se estima que hay más de 300 productores de cerveza en Chile y que la industria genera sobre 100.000 puestos de trabajo (directos, indirectos e inducidos).

Según datos de la Asociación de Productores de Cerveza de Chile A.G., entre 2005 y 2023 el consumo per cápita aumentó de 30 a 57 litros per cápita, marcando un hito en la pandemia con 65 litros consumidos por persona al año. En este período de 18 años, el crecimiento ha sido de un 88,7%.

“Las razones del aumento se le pueden atribuir a distintos factores, tales como una mayor sofisticación/conocimiento del consumidor, ser una bebida con un menor contenido de alcohol y la introducción al mercado de una mayor oferta de variedades de cerveza, que permiten acompañar mejor distintas ocasiones de consumo”, comentó la Gerente General en Asociación de Productores de Cerveza, Ximena Bravo Cavicchioli.

“Por otra parte, la disminución del consumo en el último par de años se puede explicar por la inestabilidad económica nacional e internacional, acercándose a los niveles prepandemia”, agregó.

Respecto de la producción nacional de cerveza, según cifras de ACECHI, el total nacional estimado en 2023 es de 9,66 millones de hectolitros.
De acuerdo con cifras de Euromonitor1, el consumo per cápita en Chile de bebidas con alcohol, asciende a 93,5 litros (base mayores de 15 años), y se encuentra por sobre el promedio OCDE, pero muy por debajo de niveles en países más desarrollados como EE.UU. y Canadá. Según la misma fuente, la cerveza representa cerca del 76% del total de bebidas con alcohol consumidas en nuestro país.

Tendencias del sector

En la encuesta, Voz de la Industria de Euromonitor, el sector cervecero ha estado marcado por las siguientes tendencias en los últimos años:

• A inicios del 2022 se vio marcado por una premiumización del consumo, aumentando la demanda de marcas premium, craft e importadas, relacionado directamente con la mayor liquidez y disposición de gastar. Esta tendencia perdió fuerza al empeorar las condiciones económicas a fines de 2022 y en 2023, según explicó ACECHI.

• La generación Z ha marcado la demanda de bebidas con menor graduación alcohólica, donde el 38,9% de la generación Z en Latinoamérica declaró beber alcohol menos de una vez al mes. En este punto, podemos agregar que en Chile, la versión 2023 del Estudio Nacional de Drogas en Población General realizado por SENDA1, destaca la caída de un 5% en las declaraciones de consumo de alcohol en el último mes, lo que se explica por la disminución de declaración de consumo en ambos sexos y un descenso de 14% en la población de 25 años.

• En lo que se refiere a canales de venta, el primer año de completa normalidad luego de la pandemia, estuvo marcado por la venta de bebidas con alcohol a través de canales On-trade por sobre el Off-trade. Y las subcategorías de bebidas con alcohol de uso común en la mixología, como los licores y el gin, gozaron de una demanda superior que les permitió anotar TCACs 2018-2022 de 13,7% y 42,9% respectivamente.

• Cabe señalar que, a raíz de los gustos de los nuevos consumidores y su interés por probar nuevas mezclas y sabores, se espera un crecimiento en las categorías pequeñas, como la Sidra y los RTDs (“Ready to drinks”). Asimismo, se ha visto que la Sidra cuenta con el beneficio de ser baja en contenido de alcohol y en 2022, fue la única categoría de bebidas con alcohol con crecimiento interanual positivo.

Respecto de la industria, cabe agregar que el 7 de julio de este año, entró en vigencia la obligación de incorporar la rotulación de calorías en las bebidas con alcohol, junto con las advertencias de consumo, tanto en envases y embalajes como en la publicidad, lo que ha sido significado un gran desafío a los productores de todos los tamaños.