¿Cuáles serán los looks más "instagrameables" del año?
Para algunos es irrelevante, para otros, un medio de expresión. Es un hecho que, a menudo, la moda es uno de los tópicos favoritos de muchas personas. Existen muchos estilos diferentes, dependiendo de la cultura o preferencias particulares de cada persona. Lo que sí es un hecho, es que existen tendencias observables y que tienden a cambiar cada temporada. Esto es lo que sabemos sobre el futuro de la moda en el 2024.
Marta Benayas Álamos, colaboradora de moda y belleza en diversos medios, dio a conocer a ABC sus percepciones sobre la moda este año, señalando que “en un momento en el que las tendencias se mueven a un ritmo más rápido de lo que en muchas ocasiones se puede asimilar, las corrientes de estilo vienen y van”.
Vuelven los 2000
Se trata de una época que suele generar opiniones fuertes en las personas. Y es que la moda de inicios de los 2000 no se caracterizó por pasar desapercibida. Esta moda comenzó en 2023 y no tiene apariencia de detenerse pronto.
Según Benayas, “se verán los pantalones cargo, los micro tops y las micro faldas. Pero también los tops sin tirantes y las faldas con el dobladillo acampanado, los vestidos asimétricos, las camisetas sin mangas, los volantes y el total look denim, sin duda uno de los imprescindibles de esos años”.
Y agregó que “además, seguirán destacando prendas como los pequeños cárdigan y los conjuntos con múltiples capas, así como la exhibición de lencería, el calzado de punta y los collares ajustados, todo dentro de una amplia paleta de colores que abarca desde tonos suaves hasta colores fluorescentes y metalizados”.
En pocas palabras, resaltarán los looks donde haya un elemento caótico dentro, haciendo eco de una de las décadas más singulares en cuanto a tendencias.
El lujo silencioso nunca pasa de moda
Contrario a lo que se piensa, el lujo silencioso no tiene por qué ser sinónimo de ropa costosa o de diseñador. Se trata de apostar por prendas básicas, elegantes y a la vez sencillas. Algunos ejemplos de este tipo de looks son el estilo atemporal de la princesa Diana de Gales, o la socialité Sofía Richie.
Benayas señala en ABC que “seguirán teniendo una presencia destacada las prendas deportivas, con patrones limpios y cortes simples con los que poder integrarlos con otras piezas más sofisticadas, reinventando en cierto modo el ‘athleisure’ y concediéndole un toque ligeramente chic muy favorecedor”.
Accesorios grandes
“En cuanto a los accesorios, también se echará la vista atrás a estas décadas y lo pequeño se volverá grande. Se verán de nuevo los shopping bags XXL, colgantes y pendientes metalizados de gran tamaño (si pueden ser en dorado, mejor)”, sostiene la experta.
También apunta a que, por el contrario, el calzado debería ser más discreto. Por ejemplo, optando por bailarinas, zapatos Mary-Jane o zapatillas de diseños más sencillos, donde la apuesta ganadora reside en aquellos modelos ligeros que recuerdan a las clásicas tenis.