Tener una buena cuenta bancaria es fundamental para poder realizar la mayoría de las actividades que llevamos a cabo diariamente. Desde comprar productos en el supermercado hasta pagar las cuentas básicas, es un elemento con el que debemos contar siempre.

Sin embargo, para mantener las finanzas personaless ordenadas, también debemos fijarnos en detalles como los costos adicionales que conlleva mantener una cuenta bancaria, y las ventajas de tener una que no incurra en esos costos. A continuación, puedes encontrar estos y más consejos para organizar tus gastos.

Ahorra en comisiones y maximiza tus ingresos

Un factor que debes tener siempre presente al solicitar una cuenta bancaria es la comisión que te cobrará cada banco por tener este producto financiero. Puedes ahorrar una cantidad considerable de dinero solamente al no pagar estos costos adicionales.

En ese sentido, la empresa bancaria Consorcio ha presentado una cuenta corriente costo cero, que permite mantener tus finanzas ordenadas y disfrutar de atractivos beneficios. Esta cuenta corriente online incluye una tarjeta de débito, para realizar compras tanto en Chile como en el extranjero.

Por otra parte, si buscas una alternativa que cuente con tarjeta de crédito, la compañía apunta como una opción su Cuenta Corriente Plus. Este plan de cuenta corriente solicita una serie de requisitos para poder obtenerlo, pero también contempla una línea de crédito, y descuentos especiales en tiendas y comercios. Incluso, si cumples con ciertas condiciones, no se te cobrará por su uso.

Finalmente, en caso de que recién estés ingresando al mundo bancario, una buena alternativa es la Cuenta Vista Más. Este producto te permitirá ahorrar de forma fácil y ganar dinero solo por tener saldo en tu Cuenta Vista. Si bien tiene un costo de mantención mensual, este costo se reducirá a cero en caso de que ya tengas una Cuenta Corriente Plus.

Podrás acceder a descuentos especiales

Al contar con tu propia cuenta bancaria, podrás disfrutar de múltiples beneficios, que irán variando en función del tiempo y de la institución en la que estés. A la larga, esto puede ayudarte a ahorrar mucho dinero.

Por ejemplo, si te gusta salir a comer fuera de casa, quizás sea una buena idea buscar una cuenta bancaria que te ofrezca atractivos descuentos en restaurantes. En cambio, si eres fan del cine o de las series, hay opciones como la Cuenta Corriente Simple de Consorcio, por ejemplo, que entrega beneficios como la devolución de hasta $10.000 mensuales del pago de tus servicios de streaming.

Puedes solicitar esta cuenta corriente de forma 100% online y obtenerla en pocos minutos, sin contar que tiene un costo de mantención mensual de $0.

Métodos para ahorrar dinero con tu cuenta bancaria

Además de las ventajas ya indicadas, te contamos sobre varios métodos de ahorro que quizás no conocías, para ayudarte a cumplir tus metas.

-Fórmula de ahorro 50-30-20: en resumen, lo ideal es destinar un 50% de tus ingresos a gastos básicos, un 30% para libre disposición y un 20% para ahorro.

-Método japonés: también conocido como kakebo, se trata de llevar un registro de todos los ingresos y gastos que tengas. No se puede dejar nada sin registrar. De esta forma, quedarán a la vista los gastos que se pueden eliminar para seguir ahorrando. Para ello, puedes usar una agenda, una hoja de cálculo en Excel o Google Sheets.

-Desafío de las 52 semanas: este método es bastante útil si no tienes hábitos de ahorro. Trata de ir ahorrando dinero semana a semana, pero aumentando la cantidad ahorrada cada siete días. Por ejemplo, si en la semana uno ahorraste $5.000, en la semana dos deberán ser $6.000, y así de forma sucesiva. Podrás reunir más de $300.000 a final de año.

-Reto de 30 días: una variación del formato anterior es ahorrar por día. Es decir, si el primer día ahorraste $1.000, el segundo deberás ahorrar $2.000 y así. Dado que en un mes podrías ahorrar hasta $465.000, puedes partir con un ahorro más bajo si tus ingresos no son tan altos.

-Utiliza una alcancía: para los dos casos anteriores, y si te resulta más cómodo, puedes usar la tradicional alcancía para guardar tus ahorros. A fin de mes puedes depositar el total en tu cuenta bancaria.

-Método Harv Eker: este escritor y empresario canadiense recomendó repartir los ingresos de la siguiente forma. Un 55% para necesidades básicas, 10% para cursos o libros, 10% para ocio, 5% para donativo y un 10% para ahorro.

Aunque parezca un poco evidente, siempre es importante no gastar más de lo que se ingresa. Si surge algún gasto extraordinario, utilizar una tarjeta de crédito es una buena alternativa, pero siempre manteniendo tus finanzas ordenadas.

También es una buena opción el utilizar apps de ahorro, en donde puedes llevar un registro más rápido de tus gastos e ingresos.