Cuando se habla de pronósticos del tiempo en Chile, es común escuchar sobre milímetros de lluvias, ¿pero qué significa realmente esta medida y cómo se contabilizan las precipitaciones o qué es 1 mm de lluvia?
Para ejemplificar, durante esta semana se ha hablado de más de 120 mm de lluvia en ciertas ciudades como Concepción, en el Bío Bío, debido al actual sistema frontal en el país.
La misma cantidad de agua caída se anuncia para la región Metropolitana en 1 solo día. ¿Cómo entender la cantidad de lluvias cuando nos hablan de milímetros?
¿Cómo se mide la lluvia en Chile?
En Chile, la medición de las precipitaciones se lleva a cabo utilizando pluviómetros, que son instrumentos diseñados para recoger y medir la cantidad de lluvia caída en un área específica durante un período determinado.
Estos dispositivos se encuentran distribuidos por todo el territorio nacional, siendo administrados principalmente por la Dirección Meteorológica de Chile y otras instituciones como el Ministerio de Obras Públicas, a través de su Dirección General de Aguas.
El pluviómetro más común es el de tipo cilíndrico, que cuenta con un recipiente de captura y un mecanismo para medir el nivel del agua acumulada. Sin embargo, existen otros modelos más profesionales y con mediciones más exactas.
¿Qué significan los milímetros (mm) de agua caída?
La medición de un pluviómetro se expresa en milímetros, indicando el espesor de la capa de agua que se formaría si toda la lluvia caída se distribuyera uniformemente sobre una superficie plana.
Un milímetro (mm) de lluvia equivale a la cantidad de agua necesaria para cubrir un metro cuadrado de superficie.
Entonces, ¿cuánto o qué es 1 mm de lluvia?
Así, cuando los informes meteorológicos indican, por ejemplo, que se han registrado 10 milímetros de lluvia, esto significa que cada metro cuadrado del área afectada ha recibido 10 litros o 1 cm de agua.
Dicho de otro modo, si en Concepción se registraron 120 milímetros de lluvia en un solo día, hablamos que en 24 horas cayeron 120 litros de agua dentro de un metro cuadrado medido o 12 centímetros.
Esta medida es crucial para diversos aspectos, desde la agricultura, donde se utilizan estos datos para planificar los riegos y proteger las cosechas, hasta la gestión de recursos hídricos y la prevención de desastres naturales, como inundaciones y deslizamientos de tierra.
En áreas urbanas, entender la cantidad de lluvia es vital para el diseño de sistemas de drenaje eficientes y para la planificación urbana.