Durante esta semana, se viralizó una escena donde un hombre hacía gestos a la cámara de un matinal de la televisión chilena, algo que interpretado como una amenaza por los conductores, a pesar de que se trataría de un gesto que hace alusión al mewing.
Anteriormente, el gobernador de la región Metropolitana, Claudio Orrego, también hizo el mencionado gesto en un punto de prensa, apuntando a la misma técnica viral en Internet, y también tuvo que dar explicaciones tras confusiones que pensaban que era una amenaza.
Se trata de una de las tendencias de belleza actuales, donde, especialmente en TikTok, se convirtió en una de las plataformas con más tutoriales para lograrlas de forma casera. En concreto, serviría para armonizar la cara, definir la mandíbula y eliminar la papada. ¿Qué tan cierto es?
¿Qué es el mewing y para qué sirve?
Pero si aún no entiendes qué es el mewing, te explicamos que se trata de una técnica casera que te enseña a utilizar la posición y fuerza de la lengua para modificar el perfil de tu rostro.
Básicamente, consiste en levantar la lengua hacia el paladar, cerrando los labios y manteniendo dicha posición como se ve en el siguiente video:
Entre los otros resultados que se le atribuyen al mewing en el mundo del Internet y las redes sociales, está mejorar la respiración, corregir la posición de los maxilares y aliviar los dolores de la mandíbula. ¿Pero qué hay de cierto en todas estas afirmaciones?
¿Funciona el mewing? ¿Qué dicen los expertos?
Lamentablemente, la ciencia dice que esta postura facial es temporal y no permite obtener resultados permanentes. De hecho, no existen pruebas científicas que demuestren que el mewing funcione, a pesar de la tendencia que usuarios de TikTok están marcando.
Aún más, practicarlo de modo indiscriminado puede ser perjudicial para la salud. Los expertos recomiendan hacerlo de a ratos, ya que de manera extensa, podría desgastar el esmalte de tus dientes, o causar dolores en la boca, la mandíbula y el cuello.
En ese sentido, Renato Gunckel, cirujano maxilofacial de Clínica Las Condes, afirmó a BioBioChile que “el mewing no tiene ningún respaldo científico que avale su práctica”. El especialista aseveró que “esta técnica tendría un efecto en niños que están en desarrollo, ya que ubicar bien la lengua en el paladar hace que el fondo del maxilar superior se desarrolle correctamente, pero no así en personas con su crecimiento culminado”.
“Eventualmente, se podría generar una hipertrofia de los músculos maseteros, pero en la medida en que uno no lo mantenga en el tiempo, esa musculatura volvería a su volumen natural”, agregó.
Por su parte, Estaban Torres, cirujano plástico de la Pontificia Universidad Católica, también explicó que este procedimiento podría ayudar principalmente cuando existe una mala posición de la lengua o a mejorar el aspecto de la papada, “pero todo va a depender de cada persona”.
¿Cuál es el origen de esta técnica?
El origen de la técnica del mewing se le atribuye al ortodoncista británico John Mew, quien en los años 70 dejó de lado los aparatos dentales y comenzó a tratar a sus pacientes con esta técnica.
Décadas más tarde, su hijo, el Dr. Mike Mew, difundió este procedimiento a través Internet, situación que terminó con su expulsión de la Sociedad de Ortodoncia Británica.