Un femicidio es la muerte violenta de una mujer por razón de su género. En ese sentido, aunque todos los femicidios son también homicidios, no todos los homicidios de mujeres pueden ser calificados como femicidios. Lo anterior, según explica el manual de investigación con perspectiva de género de la fiscalía.
En 2023, el Ministerio de la Mujer contabilizó 41 femicidios consumados. En 2013, hace 10 años, se registraron 40 femicidios. En 2016 hubo 34, la cifra más baja registrada en los últimos años. De ahí en adelante la cifra ha continuado sobre los 40, alcanzando en algunos casos los 46 anuales.
Si bien puede parecer que los números no bajan, lo cierto es que se deben considerar algunos hitos, como la ley Gabriela en 2019, que permitió considerar el femicidio en un sentido más amplio. Así, hoy se contabilizan casos que antes se habrían considerado como homicidios. Sin embargo, según expertas, esto tampoco llama a relajarse.
De los 41 femicidios consumados del 2023, en nueve casos existía una denuncia contra el agresor. Cuando hablamos de los femicidios frustrados, la cifra asciende, 91 de los 222, tenían una denuncia en su contra. Lo anterior, según datos proporcionados por el Servicio Nacional de la Mujer (Sernameg) desde el Sistema de Registros de Atención a Víctimas.
Si bien una parte importante de los femicidas no tenía una denuncia previa, cabe recordar que esto no siempre es una posibilidad para todas las víctimas de violencia. También, a pesar de estar denunciados, en nueve casos las afectadas alertaron que algo les podía pasar, y les pasó. ¿Cómo se interpretan estas cifras?
Un problema sociocultural
La directora ejecutiva de Corporación Miles, Javiera Canales, comentó a BioBioChile que la cultura es clave para garantizar la adecuada protección de las mujeres. “Aun cuando la víctima denuncie sucesivamente, por ser simples delitos, no hay una movilización del Estado para la debida protección, porque las leyes están hechas para el hombre medio”, aseguró.
Canales explica que el hombre medio es aquella persona a quien se le dice que no haga tal cosa y obedece. Por ejemplo, en el caso de una medida cautelar de prohibición de acercarse a la víctima.
“Lo que vemos es que el hombre que agrede, o la persona en términos generales, no es el hombre medio. Se va a acercar igual, por una lógica cultural, porque entiende que esa mujer le pertenece, es parte de su propiedad. Entonces, aunque tengamos leyes eficientes, mientras no cambiemos los patrones socioculturales, no vamos a poder realmente avanzar para disminuir la violencia”, aseguró.
La directora ejecutiva de Corporación Miles señaló que, aun cuando hay muchas mujeres que afortunadamente están denunciando, de todas formas son asesinadas. Apuntó a que son asesinadas porque se trata de algo cultural que, en sus palabras, un Poder Judicial no puede resolver por sí solo, por muchas barreras que igual tenga.
“Lamentablemente, vemos como hay muchos comentarios que terminan atribuyéndole la responsabilidad a las mujeres, una vez más. Se le juzgaba porque denunciaba, ahora denuncia y, muchas veces, denunciar las pone en una situación de riesgo mayor ¿Por qué? Porque activa la violencia en el sentido de que ‘si yo lo denuncio, él se va a enojar más’. Porque ve que ella se está alejando de su patrimonio, porque interviene un tercero. Y ellas saben que esa activación de violencia no la va a detener un tribunal”, concluyó.
Trabajar por una respuesta oportuna
“Nosotros queremos que las mujeres confíen en nuestro sistema, confíen en las instituciones y, para ello, tenemos que fortalecer el trabajo y la respuesta que damos como Estado, que sea oportuna, que sea certera”, aseguró Priscilla Carrasco Pizarro, directora nacional de Sernameg, a BioBioChile.
La autoridad señaló que “queremos representar jurídicamente a las mujeres que viven violencia de género, pero también acompañarlas del punto de vista psicosocial de manera muy especializada y profunda en esos procesos”.
“Como servicio vamos a trabajar fuertemente en la prevención. Si es que ocurren estos hechos, las mujeres que son víctimas, que son sobrevivientes, obtengan reparación, justicia, obtengan reparación psicológica, social, u obtengan reparación en el caso de los niños y las niñas que son hijos de mujeres que han muerto a manos de sus parejas”, agregó.
Cabe recordar que no es necesario que una mujer haga una denuncia previamente para poder recibir ayuda y orientación desde los diferentes canales del Servicio.
Quiénes eran las 41 mujeres asesinadas en 2023
Nataly Muñoz Thather, 29 años. Marianela Santander Vega, 44 años. María Cristina Rodríguez Álvarez, 41 años. Rossana Del Carmen Flores Vega, 38 años. Gabriela Salazar Valenzuela, 39 años. Teresa Cea Cea, 60 años. Karen Gómez Bravo, 20 años. Camila Ugalde Gómez, 19 años. Alexandra Benítez Quina, 35 años. Yenifer Cortes Filigrana, 30 años. Yesibeth Lastra Gutiérrez, 23 años. Tránsito San Martin Fuentealba, 61 años. Bárbara Contreras Miranda, 33 años. Melida Bernal Cáceres, 38 años. Carol González Venegas, 37 años. Krishna Olivares Tapia, 22 años. Lesly Galdames Vega, 29 años. Sindy Caballero Celin, 32 años. Silvia Huenchuan Guaitiao, 57 años. Karin Guajardo González, 41 años. Gabriela del Carmen Montoya Montoya, 38 años. Carolina Gálvez Bustamante, 33 años. Raquel del Carmen Melita Roca, 47 años. Ana Rosa Solís Zamora, 49 años. Jéssica Pamela Alarcón Álvarez, 49 años de edad. Luz Eliana Saavedra Cocio, 42 años. Paulette Margarita Díaz Vargas, 33 años. Ethilina Casseus, 30 años. Raquel Díaz Jiménez, 38 años. Teresa del Rosario Mejías Muñoz, 56 años. Karen Liliana Moreno Cernia, 25 años. Marcela del Pilar Pérez Tapia, 32 años. Elsa del Carmen Espinoza Garrido, 74 años. Alejandra Elizabeth Palma Chávez, 31 años. Margarita María López Vera, 47 años. Patricia Elena Zapata Restrepo, 48 años. Ana Beatriz Neipan Vargas, 29 años de edad. Mariela Andrea Fuentealba Delgado, 43 años. Carmen Rosa Santos Villanueva, 64 años. Nenerose Destiron, 39 años. Diana Carolina Guaina Jerez, 29 años.
Adicionalmente, hasta la fecha, ocho mujeres han sido asesinadas en lo que va el año 2024. El último caso registrado ocurrió este miércoles 6 de marzo, en la comuna de Alto Hospicio, región de Tarapacá.