Según expertos y un estudio científico, consumir líquidos calientes sería más beneficioso para combatir el calor, entre otras cosas, porque obliga al cuerpo a "sudar ese calor". Lo anterior no aplica en lugares muy húmedos, como una selva tropical o un sauna.

Antes las altas temperaturas, varios son los consejos o “recetas caseras” para combatir el calor, sin embargo, en algunos casos no hay consenso suficiente entre la población, por ejemplo, respecto a si es que hay que tomar líquidos fríos o calientes para bajar la temperatura corporal.

Conforme a expertos y una investigación científica, las bebidas calientes tendrían un mejor efecto para el calor, pero una salvedad importante, que tiene que ver con la humedad.

¿Qué es mejor: tomar bebidas calientes o frías?

Para responder la pregunta: ¿qué es mejor, tomar agua fría o caliente cuando hace calor?, el medio El Mundo, de España, preguntó José Antonio Latorre Rodríguez, profesor colaborador de los Estudios de Salud de la Universidad Abierta de Cataluña (UOC).

Si la bebida está fresca (15-17ºC) es más apetecible e incita a beber. Esto es fundamental en el deporte y en poblaciones vulnerables como ancianos y niños. Las bebidas calientes, por su parte, provocan que el cuerpo trate de volver al equilibrio, provocando sudoración para disipar calor. Esta es la razón de su uso en algunas culturas”, relató el experto.

Por su parte, Ata Pouramini, director de Quiropractic Valencia y orientador en salud, dijo al mismo medio que “las bebidas calientes, al entrar en contacto con la lengua y la garganta, hacen que los sensores del cuerpo reaccionen y, como consecuencia, estimulen la sudoración. Asimismo, esto provoca que el sudor se evapore y que el cuerpo se enfríe”.

En otra vereda, la especialista en nutrición María Amaro añadió que “las bebidas frías nos proporcionan una sensación refrescante inmediata, pero, si las tomamos en gran cantidad, el organismo tiene que emplearse a fondo para hacer frente a esa bajada brusca de temperatura para equilibrarla hasta llegar a esos 37 grados habituales”.

“Esto supone un gasto energético con el que conseguimos el efecto opuesto al que pretendíamos porque, en lugar de refrescarnos, nos acaloramos”, añadió.

¿Cuál es la conclusión para la ciencia?

Acorde a lo publicado por la Oficina de Ciencia y Sociedad de la Universidad McGill en Canadá, un estudio científico comprobó que el agua caliente sería mejor remedio para combatir el calor, frente al líquido frío.

La investigación dotó a ciclistas de sensores de temperatura mientras mantenían constantes la temperatura y la humedad en el laboratorio. En ese instante hicieron que consumieran bebidas frías o calientes mientras andaban en bicicleta.

Los datos revelaron que aquellos que bebieron agua caliente (aproximadamente 50 grados C) almacenaron menos calor en sus cuerpos que los demás.

El Dr. Ollie Jay, investigador de la Universidad de Ottawa que probó este concepto en el laboratorio explicó que “si bebes una bebida caliente, se produce una menor cantidad de calor almacenado dentro de tu cuerpo, siempre que el sudor adicional producido cuando bebes la bebida caliente pueda evaporarse”.

El único caso en que el agua caliente no es mejor que la fría para el calor

Entonces, si estás en un ambiente muy húmedo, como un sauna, donde el sudor no puede evaporarse bien, un aumento en la tasa de sudoración no tendrá un efecto refrescante. En estas circunstancias, beber una bebida caliente no ayudará a refrescarse.

Pero, en condiciones de calor seco, las que encontramos con mayor frecuencia, y no quizás en una selva tropical, una taza de té caliente tendrá mejores efectos refrescantes a largo plazo que un vaso de té helado.