No tiene cura, sus síntomas afectan notoriamente la calidad de vida de las personas y afecta mayoritariamente a mujeres. Se trata del lipedema, enfermedad reconocida por la OMS recién desde el 2018 que "hincha" y endurece la grasa del cuerpo.
En los años 40 se habló por primera vez del lipedema y solo desde hace unos 15 años se le ha prestado mayor atención científica. Aunque aún no existen estudios epidemiológicos, se estima que unos 370 millones de mujeres en todo el mundo sufren la enfermedad.
¿Cuáles son las señales o síntomas y los posibles tratamientos para mejorar la calidad de vida de quienes padecen este trastorno sin cura?
¿Qué es la lipedema?
El lipedema es una enfermedad crónica y progresiva que consiste en la acumulación anormal de tejido adiposo (grasa) subcutáneo, principalmente en las extremidades inferiores, de acuerdo al Instituto Nacional de Salud del gobierno de Estados Unidos.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) reconoció a esta enfermedad que afecta casi exclusivamente a mujeres en el 2018. Debido a sus síntomas, muchas veces es confundida y mal diagnosticada como obesidad o linfedema.
En concreto, el lipedema consiste en una inflamación y encapsulamiento del tejido graso debido a una permeabilidad intestinal que deja pasar sustancias que no son deseables, que no son reconocidas por el cuerpo, lo que produce una hiperestimulación del sistema inmune.
Debido a lo anterior, la grasa se inflama y llega a endurecerse, comprime y causa dolor.
¿Cuáles son sus síntomas?
Anteriormente, en conversación con BioBioChile, el cirujano plástico y especialista en lipedema, Nicolás Pereira, explicó que el diagnóstico es difícil de conseguir, incluso para los médicos.
“Hay poca información en el ámbito médico. Hay pocos que saben que existe, pocos que saben diagnosticarlo y menos que saben como tratarlo”, afirmó.
Por lo general, esta patología puede estar causada por trastornos hormonales (hipotiroidismo, diabetes tipo II, ovarios poliquísticos, etc.) y puede desarrollarse en determinados momentos de la vida, como en la pubertad, durante el embarazo o la menopausia.
Entre sus síntomas se encuentran:
Acumulaciones de grasa localizada Sensación de pesadez en las extremidades afectadas Tejido celular subcutáneo duro al tacto Disminución de la elasticidad cutánea Hormigueo localizado Dificultad y/o dolor al permanecer de pie Dolor al presionar los tejidos afectados Formación de piel de naranja Formación de hematomas espontáneos
¿Tiene tratamiento y cura la lipedema?
Lamentablemente, el lipedema no tiene cura y, por lo general, empeora con el tiempo. Con el tiempo puede haber dolor, a los pacientes les salen moretones con facilidad, la movilidad puede verse reducida y, debido a la reducción de la calidad de vida, los pacientes suelen experimentan depresión.
Acorde a Medicina Lliure, existen tratamientos para controlar los síntomas y malestares, los que van desde adoptar hábitos saludables hasta operaciones quirúrgicas.
Entre los tratamientos está la terapia de compresión o drenajes linfáticos manuales.
Por otro lado, la liposucción parece ser una manera de aliviar y controlar el exceso de grasa que produce los malestares de la enfermedad.