Incluir el ejercicio en nuestra rutina diaria es muy positivo y tiene muchos beneficios para la salud en general. Sin embargo, es fundamental que esto se haga de manera gradual, ya que una sobre exigencia física que supere nuestras capacidades podría generar una condición grave que, en algunos casos, puede causar daño renal e incluso la muerte.
Hace algunos días se conoció en Panamá el caso de un grupo de seis cadetes del Servicio Nacional Aeronaval, rama de la Fuerza Pública de ese país, que presuntamente por ejercicios físicos excesivos debieron ser hospitalizados, como informa el medio La Estrella de Panamá, luego de ser diagnosticados con rabdomiólisis.
¿Qué es la rabdomiólisis?
Según lo que indica la Biblioteca de Medicina de Estados Unidos la rabdomiólisis sucede cuando hay un daño del tejido muscular que ocasiona la liberación de sustancias a la sangre, las que son dañinas para el riñón.
Cuando el tejido muscular se lesiona gravemente, se descompone y muere, liberando su contenido, incluida una proteína llamada mioglobina, en el torrente sanguíneo.
Esto último puede provocar complicaciones renales, como insuficiencia renal, y cambios en el equilibrio de electrolitos en la sangre, lo que desencadena problemas graves en el corazón y otros órganos, como señala Mundo Deportivo.
¿Cuáles son los síntomas de la rabdomiólisis?
Los síntomas de esta afección pueden variar de leves a graves. Generalmente, se desarrollan de uno a tres días después de la lesión muscular, aunque es posible que algunas personas ni siquiera noten el dolor en sus músculos.
Los principales síntomas incluyen:
– Dolor muscular intenso o hinchazón, especialmente en los hombros, los muslos o la parte inferior de la espalda
– Debilidad o rigidez muscular, o dificultad para mover los brazos o las piernas
– Orina de color rojo oscuro o marrón, o producción reducida o nula de orina
– Confusión, deshidratación o fiebre
– Falta de conciencia
– Dolor de barriga o en las articulaciones
Para la médica clínica Gabriela Ferretti, vicepresidente de la Asociación de Peritos de la Salud de la Ciudad de Buenos Aires (Aperca), “existen algunas enfermedades hereditarias, muy poco frecuentes, que pueden predisponer a un cuadro de rabdomiólisis. También algunos fármacos, como las estatinas y los suplementos dietarios con creatina, cafeína o efedrina, entre muchos otros, pueden predisponer a su aparición. No obstante, los mayores riesgos se dan por el ejercicio físico desmedido”.
Según la especialista, “cuando una persona realiza una actividad muscular que sobrepasa las capacidades físicas que el propio cuerpo puede tolerar, se pueden generar rupturas microscópicas en el músculo”.
“Por ejemplo, la práctica de spinning, electroestimulación asociada al ejercicio, maratones y otras actividades que sobrepasan la capacidad real del individuo pueden producirla, e incluso se describen estos cuadros en deportistas entrenados que no prestan atención a sus propios límites”, agregó.
Consejos para el entrenamiento de manera gradual
La Kinesióloga especialista en área vascular y rehabilitación músculo esquelética de Centro de kinesiología Kmove y coach de entrenamiento en el gimnasio GetFit, Stephanie Soto, habló con BioBioChile y se refirió a lo importante que es comenzar de manera paulatina a hacer ejercicios para ver resultados positivos.
“En todo entrenamiento se debe ir progresando con base en tus capacidades y objetivos. No es llegar y levantar 100 kilos de un día para otro o correr una maratón sin haber entrenado para ello”, expresó.
“La clave en todo este proceso es la evaluación, lo que nos permite conocer el estado actual de las personas considerando sus rangos y patrones de movimiento, resistencia, fuerza, flexibilidad y composición corporal. Con cada uno de estos componentes, se puede prescribir ejercicio de manera adecuada, sin generar un riesgo en su práctica”, agregó.
Ir de a poco y con supervisión
La experta comentó a BioBioChile que el entrenamiento con pesas tiene un impacto muy positivo en el cuerpo, pero es importante hacerlo con la asesoría de un experto.
“La lista de beneficios es larga, pero también representa un riesgo cuando no se practica de forma adecuada. Aquí es donde la asesoría y prescripción de este tipo de ejercicios debe ser realizada por profesionales del área del entrenamiento y la salud, para que la carga de peso se realice de forma adecuada y en una progresión correcta. Subir las cargas de forma gradual permite ir cumpliendo hitos y avances en el entrenamiento que dependen de las adaptaciones musculares, capacidades de la persona y los objetivos con los cuales se planificó”, manifestó.
La kinesióloga recomienda ir subiendo la intensidad y/o los pesos en el entrenamiento de manera paulatina, así esto permitirá que sea más fácil que se transforme en un estilo de vida.
“Cuando se realiza ejercicio de forma adecuada, siendo asesorado y vas viendo los avances en tu calidad de vida, mejoras en el estado de salud, estado de ánimo y la experiencia con el ejercicio es positiva, la motivación se convierte en disciplina y el ejercicio pasa a ser parte de tu vida”, expresó.
Finalmente, indicó que por lo mismo, “es tan importante ser asesorado por alguien que tenga las herramientas para prescribir ejercicio y que considere en esto las motivaciones y barreras de cada persona para lograr generar ese hábito”.