La vacuna anticovid Coronavac, desarrollada por el laboratorio chino Sinovac en conjunto con el Instituto Butantan de Brasil, se mostró eficaz contra las variantes del coronavirus identificadas en el Reino Unido y Sudáfrica, confirmaron este miércoles fuentes oficiales.
De acuerdo con Dimas Covas, presidente del Instituto Butantan, uno de los mayores centros de investigación de Latinoamérica y vinculado a la Gobernación de Sao Paulo, ya fueron realizados en China pruebas para averiguar la eficacia de la fórmula de Sinovac frente a las variantes británica y sudafricana, cuyos resultados fueron optimistas.
“Ya hemos testado allá en China nuestra vacuna contra la variante inglesa y contra la variante sudafricana, con buenos resultados”, afirmó en una rueda de prensa Covas, durante la inauguración de un estudio inédito para analizar la capacidad de la Coronavac en reducir la tasa de contagio del coronavirus.
Aunque no presentó mayores detalles sobre los ensayos realizados en China, el director informó de que el Instituto igualmente ya puso en marcha los test para verificar la eficacia del inmunizante también contra la nueva cepa detectada en la Amazonía brasileña.
“Estamos testando aquí en el Butantan contra esa variante de Manaos (capital del estado de Amazonas). Brevemente tendremos resultados y estamos muy confiados de que cumpliremos la tarea”, aseguró.
Explicó además que, por tratarse de una vacuna que utiliza el virus inactivado, la Coronavac es la menos vulnerable frente a las nuevas variantes de la covid-19.
“Entre todas las vacunas que están siendo usadas en este momento, la vacuna de virus inactivado, como esta que Butantan hizo, es la que tiene la menor probabilidad de ser afectada por las variantes”, resaltó.
Según Covas las demás tecnologías se centran en una única parte del virus, lo que podría afectar la eficacia de los inmunizantes en caso de mutación en esa fracción específica del patógeno.
Con un 50,4 % de efectividad, la Coronavac es la principal fórmula utilizada hasta ahora en la campaña nacional de vacunación iniciada en todo el territorio brasileño hace exactamente un mes.
De las 12 millones de dosis distribuidas por el Ministerio de Salud hasta el momento, 10 millones son del antídoto chino, mientras que los 2 millones restantes son de la fórmula desarrollada por el laboratorio AstraZeneca.
Sin embargo, la escasez de vacunas e insumos para su producción local, así como las dificultades logísticas, obligaron a varias ciudades, entre ellas Río de Janeiro, a suspender la inmunización hasta que reciban nuevos lotes de los antígenos.
Con unos 212 millones de habitantes, Brasil ya acumula más de 240.000 muertos y roza los 10 millones de infectados por el coronavirus, confirmándose como uno de los epicentros mundiales de la pandemia, al lado de Estados Unidos e India.