El concepto “Persona Altamente Sensible” ha circulado últimamente en las redes sociales, pero, ¿qué significa realmente?
De acuerdo a la psicóloga y docente de la Universidad del Alba, Sharon Retamal Meléndez, las personas altamente sensibles o PAS son aquellas “cuyo sistema nervioso o neurosensorial es más ‘sensible’ que el de la mayoría.
La profesional aclara que esto no es un trastorno, patología o enfermedad mental, “sino que más bien es un rasgo de la personalidad relacionado con la temperamentalidad y la manera de percibir el mundo y las emociones”.
Cómo es una persona Altamente Sensible o PAS
El término PAS fue acuñado en 1996 por la psicóloga estadounidense Elaine Aron, quien en su libro The highly Sensitive Person (“La persona altamente sensible”), dijo que este rasgo de personalidad tiene “cuatro pilares”.
Tal como recoge BBC, el primero se relaciona con la capacidad para pensar profundamente, reflexionar y analizar mucho.
Mientras, el segundo es la alta empatía, pues son personas que entienden las emociones de los demás y suelen ponerse en el lugar del otro.
En tanto, la tercera característica tiene que ver con la sensibilidad al entorno desde una perspectiva sensorial.
Por otro lado, el cuarto pilar tiene que ver con la tendencia al agobio.
“Como consecuencia de los tres anteriores está la facilidad de saturación por sobreestimulación, que hace que se llegue a un nivel de estrés alto”, indica Anna Romeu, presidenta de la Sección Psicología de Emergencias del Colegio Oficial de Psicología de Cataluña (España).
Así, para ser considerado una PAS debes identificarte con estos cuatro pilares, no sólo algunos.
Las investigaciones de Aron dieron paso a una serie de investigaciones en el área de la ciencia y la psicología, estimando que alrededor del 20% de la población tiene esta característica, sin distinción de género.
Porque ser PAS no significa tener un trastorno
Retamal ahondó en el tema y explicó que las PAS son “más susceptible frente a los estímulos con gran carga emotiva o que generen mucho estrés, incluso aquellos acontecimientos cotidianos del diario vivir los afectaría tres veces más que a otras personas, experimentando un mayor nivel de empatía frente al sufrimiento ajeno, tanto de personas, animales y naturaleza”.
La psicóloga de la Universidad del Alba, señaló que debido a esa forma diferente de percibir, procesar, reaccionar y sentir, las PAS suelen ser muy inseguras y susceptibles, pero eso no quiere decir que padezcan un trastorno o patología.
“Ser catalogado como persona altamente sensible es sólo un rasgo del funcionamiento relacionado con la personalidad, que comprende diferentes formas de funcionar y de ser”, afirmó.
“Por eso, se relaciona con constructos de personalidad, aunque también está unido de forma muy estrecha con otras concepciones neurológicas, respecto al procesamiento de la información, el umbral de percepción, entre otros”, añadió la especialista
¿Eres una PAS? Si respondes sí a los siguientes puntos es probable que lo seas:
1. Procesas la información profundamente, eres muy reflexivo, lo que te hace sentir muy preocupado o ansioso
por las decisiones que tomas.2. Eres muy sensible a estímulos externos como la luz, el sonido y el tacto, sintiéndose fácilmente abrumado por el ruido y las multitudes. Además, presentas una alta sensibilidad al dolor físico y emocional.
3. Eres muy creativo, ya sea a través de la música, la escritura, el arte o cualquier otra forma de expresión.
4. Eres muy sensible a los cambios en el estado de ánimo y el comportamiento de los demás como si fueran propios.
5. Necesitas constantemente momentos de soledad para reencontrarte contigo mismo y alejarte de los estímulos.
6. Demoras en adaptarte a los cambios.
Retamal recomendó que las personas que se identifican con estas características trabajen en la comprensión y aceptación de este rasgo, “dado que entender la indiferencia de las otras personas, permitiría niveles más bajos de estrés, culpa y ansiedad”.
Asimismo, Retamal hizo un llamado a “valorar las propias virtudes que implican estas características, ya que es fundamental para propiciar una sana aceptación”.