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Diferencia sus tipos: hepatitis, la segunda patología infecciosa que causa más muertes en el mundo

29 julio 2024 | 22:37

Según el Informe Mundial sobre la Hepatitis 2024, la hepatitis es la segunda patología infecciosa que causa más muertes en el mundo, con 1,3 millones de fallecimientos al año.

Dicha enfermedad implica una inflamación del hígado a causa un agente infeccioso viral. En muchos casos no suelen presentarse síntomas, y si se llega a reconocer la infección, ya se encuentra, lamentablemente, en etapa avanzada.

Hepatitis: una patología infecciosa de alta mortalidad

En el mundo, millones de personas tienen hepatitis y no lo saben. Por ende, se puede contagiar fácilmente si se padece alguno de los virus transmisibles de persona a persona.

Cada 28 de julio se busca concientizar sobre esta enfermedad (Día Mundial contra la Hepatitis). Se definió esta fecha en recuerdo del natalicio de Baruch Blumberg, descubridor del virus hepatitis B en 1967 y, por lo mismo, ganador del Premio Nobel de Medicina en 1976.

El doctor Javier Brahm, hepatólogo de la Clínica Universidad de Los Andes, explica que los síntomas de todos los tipos de hepatitis suelen ser bastante similares y se reconocen por presentar cansancio, náuseas, vómitos y pigmentación amarilla en la piel o en la mucosa.

“La forma de poder diagnosticar es a través de un examen de sangre, que también permite identificar el tipo de virus que se presenta”, detalla el médico especialista.

Diferentes tipos

El médico especifica que la hepatitis puede presentarse en cinco diversos tipos: A, B, C, D y E. Según la OMS, si bien todos los tipos causan enfermedad hepática, éstos se diferencian por su modo de transmisión, gravedad de la enfermedad, distribución geográfica y sus métodos de prevención.

“En particular, los tipos B y C provocan enfermedad crónica en cientos de millones de personas y, en su conjunto, son la causa más común de defunciones relacionadas con cirrosis hepática, cáncer y hepatitis viral“, detalla el organismo mundial de salud.

La misma entidad señala que, aproximadamente, 325 millones de personas sufren hepatitis B y/o C, y para la mayoría de ellas las pruebas y el tratamiento siguen siendo inaccesibles.

A continuación, te detallaremos en qué consiste cada uno de los tipos de esta enfermedad, en palabras del doctor Brahm. Te señalaremos, además, sus síntomas.

Hepatitis A: se contrae por la ingesta de agua o alimentos contaminados, o por el contacto con personas u objetos infectados con materia fecal. Es posible prevenirla con la vacunación universal y medidas de higiene óptima.

Sintomatología: el Departamento de Salud de Nueva York detalla que los síntomas de la hepatitis A pueden ser aparición súbita de fiebre, malestar, inapetencia, náuseas, dolor de estómago, orina oscura e ictericia (coloración amarilla de la piel y la parte blanca del ojo). La enfermedad rara vez es fatal y la mayoría de las personas se recupera en pocas semanas, sin complicaciones, agrega el sitio.

Hepatitis B: habitualmente se contagia por relaciones sexuales, uso de agujas contaminadas, transfusiones de sangre, tatuajes y trasmisión vertical entre la madre y el hijo. También es prevenible con la vacunación universal y su tratamiento consiste en el uso de antivirales específicos.

Sintomatología: Mayo Clinic detalla que los síntomas de la hepatitis B varían de leves a graves. Normalmente, estos aparecen de 1 a 4 meses después de haberte infectado, aunque podrían manifestarse a las dos semanas también, agrega el sitio.

Algunas personas, por lo general niños pequeños, pueden no tener síntomas, sin embargo, entre ellos, el portal médico citado enumera:

-Dolor abdominal.
-Orina oscura.
-Fiebre.
-Dolor en las articulaciones.
-Pérdida del apetito.
-Náuseas y vómitos.
-Debilidad y fatiga.
-Color amarillento en la piel y en la parte blanca de los ojos (ictericia).

Hepatitis C: su manera de transmisión es la misma que la de la hepatitis B. No existe forma de prevenir esta infección viral, más allá de mantener buenas prácticas de salud y cuidado personal, subraya Javier Brahm. Como tratamiento, existen muy eficaces antivirales.

Sintomatología: el sitio médico oficial de los Estados Unidos, MedlinePlus, señala que la mayoría de las personas con hepatitis C no tienen síntomas. “Algunas personas con hepatitis C aguda tienen síntomas entre 1 y 3 meses después de haber estado expuestos al virus”, detalla el portal. La sintomatología es la misma que la de la hepatitis B.

Hepatitis D: este tipo es poco común en nuestro país, pues se presenta en zonas mediterráneas. La forma de transmisión es similar a la de tipo B y es probable contraer hepatitis D si ya se padece la “B”. La prevención se logra con la misma vacuna universal de la hepatitis B y su tratamiento es a través de antivirales específicos recetados por un especialista.

Sintomatología: la OMS describe en este caso la existencia de síntomas indistinguibles de los de otros tipos de hepatitis víricas. Suelen aparecer entre 3 y 7 semanas después de la infección inicial, detalla la organización, entre ellos fiebre, fatiga, pérdida de apetito, náuseas, vómitos, coluria (orina oscura), acolia (heces claras) e ictericia (ojos amarillos).

Hepatitis E: la transmisión suele darse por la ingesta de agua o alimentos contaminados (por materia fecal, al igual que en la hepatitis A). Actualmente no existe ningún tipo de prevención más allá de prácticas de auto cuidado y buena higiene, detalla el hepatólogo, quien agrega que este tipo no requiere tratamiento, pues se elimina de forma espontánea.

Sintomatología: el manual médico universal, MSD, describe que las personas con hepatitis E presentan los síntomas característicos de la hepatitis aguda (mencionados ya anteriormente), entre ellos la falta de apetito, malestar general, náuseas y vómitos, fiebre, dolor abdominal e ictericia.