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La candida albicans, hongo que normalmente habita en nuestro organismo, puede causar una infección denominada candidiasis, la que puede manifestarse de forma oral, genital e incluso intestinal en casos particulares. La candidiasis intestinal es poco estudiada y nombrada. Puede aparecer en personas inmunodeprimidas, con dietas altas en procesados y azúcares, y en quienes consumen antibióticos prolongadamente. Profesionales de nutrición consideran que la alimentación desempeña un papel terapéutico en esta infección, destacando la importancia de un diagnóstico preciso y tratamiento específico. Existen síntomas confundibles con otras afecciones intestinales, por lo que se recomienda consultar con especialistas para un diagnóstico adecuado.

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La candida albicans es un hongo (una levadura, de hecho). Éste vive en nuestro organismo de manera natural, sin embargo, cuando prolifera de sobremanera, puede provocar una infección: candidiasis, la que puede ser oral, genital e incluso intestinal en casos particulares.

La candidiasis intestinal, en detalle, es una poco conocida y estudiada variedad de esta infección. De hecho, se trata de una afección que genera cierto debate en la comunidad médica. La rama de la nutrición y dietética se ha dedicado, en gran parte, a su estudio.

Ésta puede producirse en pacientes muy específicos: personas inmunodeprimidas, con una dieta alta en procesados y azúcares, y/o en pacientes que consumen antibióticos de manera prolongada. También puede darse en personas con cáncer (debido a la misma inmunosupresión).

Candidiasis intestinal: otra forma en que el hongo se manifiesta

Resulta menester explicar que la cándida es de crecimiento lento, por lo que no es un agente infeccioso que cause problemas de forma agresiva a alguien con buena inmunidad, especifica a BioBioChile el doctor Cristian Cuadra, médico internista de la Clínica Santa María.

Una infección por cándida, señala el médico, “en general ocurre no específicamente a nivel del intestino, sino que más bien a nivel del resto del organismo”, en los mismos pacientes detallados anteriormente.

“En ocasiones pueden producir problemas en la piel, lesiones en las uñas de los pies en los niños, en la cavidad oral en el esófago. En el estómago es raro porque hay acidez en el tubo digestivo, se ha hablado bastante de esto, pero hay poca evidencia científica al respecto”, complementa Cuadra.

Si bien la candidiasis intestinal genera dudas, desde el ámbito de la nutrición existen ciertos análisis al respecto. Los profesionales de salud y nutrición en España, Inma de la Casa Moreno, José Miguel Soriano del Castillo y Lydia Micó Pascual, se refieren a ella en específico.

En su estudio “Intervención dietético-terapéutica en candidiasis intestinal“, los autores sostienen que la alimentación adquiere un papel terapéutico en dicha infección, por tanto, la dieta debe ser realizada y utilizada bajo control exclusivo del dietista-nutricionista, hasta que la sintomatología se revierta o mejore considerablemente.

Sintomatología

En diálogo con BioBioChile, Elizabeth Sánchez, nutricionista especialista en patologías gastrointestinales y académica de Nutrición y Dietética de la facultad de Ciencias para el Cuidado de la Salud de la USS, explica que los síntomas de la candidiasis intestinal son confundibles.

“Corresponde a sintomatología que puede ser confundida con alergias o intolerancias alimentarias e, incluso, puede presentar síntomas solapados con otras afecciones a nivel intestinal como la disbiosis intestinal, el síndrome de intestino permeable, SIBO, entre otros”.

Antes de continuar, vale explicar lo que es la disbiosis intestinal; otro término de poco renombre. Rodrigo Cruz, gastroenterólogo de IntegraMédica, detalla a nuestro medio que se trata de una alteración de la abundancia y diversidad de bacterias de la flora intestinal sana.

“La microbiota está presente en la piel, en el intestino y en el sistema broncopulmonar. Sin embargo, más del 90% está en el intestino grueso, por eso la relevancia de cuidarla. Cuando hay disbiosis intestinal, hay predominio de microbiota no sana, es decir, de bacterias malas“, especifica.

Teniendo aquello en consideración, es que Sánchez subraya en la importancia de acudir a un profesional capacitado y especializado en el tema, “quien pueda hacer un estudio completo y el diagnóstico diferencial en base a la clínica (manifestaciones) que presente cada sujeto”.

La nutricionista detalla que dentro de los síntomas típicos que puede presentar una persona con posible candidiasis intestinal, encontramos, por ejemplo:

-Dolor abdominal tipo cólico.
-Distensión abdominal.
-Aumento de la producción de gases.
-Diarrea o estreñimiento.
-Fatiga crónica.
-Náuseas.
-Otros signos de alerta son las infecciones recurrentes en otras partes del cuerpo (vaginales o de la piel).

Tal como se ha planteado en esta nota, la sintomatología de la candidiasis intestinal puede resultar muy similar a la de otras patologías gastrointestinales. Por ello, enfatizamos en la importancia de asistir donde un especialista para encontrar el origen correcto de tu malestar, descartando antes la posible existencia de otras afecciones más habituales del intestino.

“Infección poco entendida”

Cala Cervera, especialista en nutrición ortomolecular del Institute for Optimum Nutrition de Londres, agrega en su artículo “Candidiasis crónica” que ésta es una infección poco entendida y mayoritariamente ignorada en las consultas médicas.

“Se relaciona principalmente con infecciones vaginales u orales, sin embargo, su origen suele ser intestinal. Los síntomas que producen las cándidas son muchos y muy complejos, y las pruebas de laboratorio no son fiables. Como resultado, la mayoría de los pacientes con candidiasis no son diagnosticados, convirtiéndose en pacientes crónicos“, detalla la experta.

Cervera destaca algo no menor: “Muchas personas con candidiasis son tratadas como pacientes hipocondríacos, deprimidos y/o ansiosos. Desafortunamente, hay mucha gente con candidiasis, que no ha sido diagnosticada, y a cambio, están tomando Prozac, Seroxat o ansiolíticos“.

Dentro de los gatillantes de la candidiasis intestinal, Elizabeth Sánchez destaca ciertas variables que fueron mencionadas previamente en esta nota: “Puede ser gatillada por diversos factores, como por ejemplo, debido a un desequilibrio o disbiosis intestinal en donde exista prevalencia de organismos patógenos“.

El uso prolongado de antibióticos también está en el listado, tal como se detalló al principio de este artículo. ¿Por qué? Pues porque los antibióticos eliminan poblaciones de bacterias beneficiosas que ayudan a mantener controlado el sobrecrecimiento de cándida.

Por otro lado, Sánchez detalla que una alimentación alta en ultraprocesados (principalmente azúcares), “alimenta” el crecimiento de cándida y produce hiperglicemia (azúcar alta en la sangre) , lo que puede generar cambios a nivel de la microbiota intestinal.

Diagnóstico y tratamiento de la candidiasis intestinal

Con sus declaraciones, la académica de la USS respalda lo detallado en el estudio “Intervención dietético-terapéutica en candidiasis intestinal” respecto al tratamiento de la misma: “Éste consiste, básicamente, en la indicación médica de antifúngicos, acompañado de cambios en el estilo de vida y alimentación“.

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El cambio en la dieta, explica Sánchez, tiene como objetivo el corregir aquellos agentes gatillantes de la infección (como, por ejemplo, la disbiosis intestinal).

En la actualidad también se están usando suplementos que favorecen la inhibición y/o reducción del crecimiento de cándida, tales como el ácido caprílico -un tipo de ácido graso-, aceite de orégano y/o probióticos específicos, agrega la profesional.

Elizabeth añade que para poder diagnosticar la candidiasis intestinal, lo primero y más importante es acudir a un médico gastroenterólogo o médico funcional quien podrá, de manera personalizada, indicarle al paciente la toma de alguno de los siguientes exámenes:

-Estudios endoscópicos (que permitan visualizar el revestimiento intestinal y tomar biopsias en caso de que sea necesario).
-Test de aire espirado (para identificar si existe fermentación anormal de ciertos azúcares y evaluar la presencia de SIBO).
-Canditest (examen de sangre que permite evaluar candida albicans midiendo anticuerpos específicos para ella).