El Virus del Papiloma Humano (VPH) es una de las infecciones de trasmisión sexual más común en la población mundial. Sin embargo, sus letales repercusiones en la salud -sobre todo en mujeres- no son tan conocidos entre las personas. De hecho, está fuertemente relacionado con el desarrollo de cáncer en aquellos que lo poseen.
Para profundizar sobre sus efectos, BioBioChile conversó con la doctora Andrea Schilling, médico ginecobstetra e investigadora, quien detalló sus factores de riesgo y complicaciones médicas, así como las medidas que se deben adoptar para prevenirlo.
Generalmente, cuando se habla del VPH, en realidad se hace referencia a un grupo con cerca de 200 distintos virus papiloma humano, el cual se transmite por el contacto íntimo y al tener relaciones sexuales vaginales, anales u orales.
“La infección por este virus, puede causar verrugas genitales y, sobre todo, diferentes tipos cáncer, como el de cuello uterino, ano y orofaringe, aunque también cáncer de pene, de vagina y de vulva”, especificó la doctora Schilling.
Pese a que la mayoría de las enfermedades y/o infecciones de transmisión sexual pueden generar síntomas, en el caso del papiloma humano puede no haber señales que alerten de su presencia en el organismo.
En este sentido, la especialista en salud calificó esta característica como preocupante, dado que “puede no presentar ningún síntoma por años, hasta que la enfermedad está muy desarrollada, como es el caso del cáncer del cuello del útero. Solo los exámenes preventivos permiten pesquisarlo en una etapa de pre-cáncer”.
Factores de riesgo y complicaciones a la salud que conlleva el VPH
Este virus es tan común que, según la doctora Schilling, el 90% de las personas que tienen o tendrán actividad sexual, tienen o tendrán el virus. Asimismo, cerca de 30 millones de hombres y mujeres presentan cada año de verrugas genitales producto del virus papiloma humano.
El sexo penetrativo vaginal o anal es la vía más tradicional para adquirir un virus papiloma, pero también se puede contagiar a través del contacto directo con la piel durante la actividad sexual, incluyendo el sexo oral.
“Evidentemente, el riesgo es mayor mientras más relaciones sexuales tuvo el paciente, si las empezó a tener a más temprana edad, el número de parejas o si no usó condón. Pero cualquiera que tiene una vida sexual se puede infectar”, especificó la médico.
Además de los diferentes tipos de cáncer, la especialista explicó que otras complicaciones a las que se expone un paciente con VPH son el impacto psicológico – principalmente asociado con la presencia de verrugas en la zona íntima- y la estigmatización que podría sufrir el portador del virus.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), el Virus del Papiloma Humano (VPH) causó aproximadamente 620.000 casos de cáncer en mujeres y 70.000 en los hombres, durante el 2019”, detalló la entidad de salud.
Vale mencionar que este virus puede ser más común en personas cuyas defensas estén bajas. Por eso, “es más frecuente en pacientes que conviven con el VIH/SIDA o en personas inmunosuprimidas”, acotó la ginecobstetra.
¿Cómo prevenir el virus del papiloma humano?
El uso del condón disminuye el riesgo de contraer el VPH, pero este no tendrá el mismo efecto que con otras infecciones de trasmisión sexual (como hepatitis, VIH, sífilis o gonorrea), “ya que no cubre todas las superficies expuestas al contacto con el virus”, detalló el portal InfoVPH.
De acuerdo con la doctora Andrea Schilling, uno de los métodos más adecuados para evitar la infección es la vacunación contra el papiloma humano. En Chile, las vacunas se ponen gratuitas para niñas y niños (la primera dosis en 4.º básico y la segunda dosis en 5.º básico).
Aunque mucha gente no lo sabe, la inoculación contra este virus también es gratis para los pacientes de hasta los 26 años que conviven con el VIH/SIDA, sin embargo, en este caso corresponden tres dosis, agregó la especialista. Además, “la vacuna se la pueden poner por su cuenta hombres y mujeres en hasta los 45 años. Esa es la aprobación que tiene la vacuna en Chile”, agregó la médico.
En esta misma línea, la doctora Schilling sugiere que –en el caso de las mujeres- la vacunación se debe complementar con la realización de exámenes preventivos, como la prueba de Papanicolaou o detección del VPH, que ayuden a la detección temprana del cáncer y otras patologías graves.