Para días con un resfrío, buenos son los caldos. Un plato tradicional en la mesa de un chileno cuando se enferma es la sopa de pollo. Averiguar por qué este plato de comida es un “remedio” sano y efectivo para combatir la gripe, es la clave.
Es fundamental aclarar que las sopas procesadas no tiene el mismo efecto que las realizadas en casa.
Colby Teeman, profesor de nutrición y dietética de la universidad de Dayton, en una entrevista para The Conversation, indica que, “las versiones enlatadas ultraprocesadas de la sopa de pollo, tanto con fideos como sin ellos, carecen de muchos de los antioxidantes que se encuentran en las versiones caseras”.
Caldo de pollo casero
En cambio, el pollo de comida casera proporciona al organismo una fuente completa de proteínas para combatir las infecciones. Además el sabor es fundamental para las propiedades curativas de la sopa.
Las verduras y condimentos que acompañan al caldo aportan una amplia gama de vitaminas, minerales y antioxidantes. Si se preparan junto con carbohidratos, estos ayudan al cuerpo para obtener energía y recuperarse, añade el experto.
Sumado a ello, “el calor de la sopa de pollo puede ayudar. Beber el líquido e inhalar los vapores aumenta la temperatura de los conductos nasales y respiratorios, lo que afloja la espesa mucosidad que suele acompañar a las enfermedades respiratorias” señala Colby Teeman.
Aún así, no está completamente comprobado que la sopa de pollo ayude a curar una enfermedad como el resfrío. Según Yael Toporowicz, nutricionista de IntegraMédica, “se puede considerar como medida dietética, sin embargo, no reemplaza la terapia farmacológica indicada por un médico tratante”, detalla.
¿Qué ocurre cuando ataca un resfrío?
Los glóbulos blancos viajan a un tejido con lesión o enfermedad. La inflamación es parte de la respuesta natural del cuerpo, cuando este proceso inflamatorio sucede en las vías respiratorias superiores, produce síntomas de resfriado común y gripe.
En un estudio, no realizado en humanos, encabezado por Stephen Rennard, médico y profesor de Medicina en la Universidad del Centro Médico de Nebraska en Omaha, Estados Unidos, se analizó específicamente el movimiento de los neutrófilos —una clase de glóbulo blanco— en combinación con la sopa.
Se determinó que el movimiento de los neutrófilos se reducía en presencia de la sopa, lo que indica que podría existir un mecanismo antiinflamatorio que, en teoría, podría aliviar los síntomas.
“Hay sustancias (en la sopa de pollo) que podrían afectar a las células del cuerpo, y tener efectos curativos, pero no investigamos si son buenos o malos”, señaló Stephen Rennard, quien además recalca que se necesitan muchas investigaciones más para clarificar su verdadera función.
¿Vale la pena un plato con caldo de pollo?
La nutricionista, Yael Toporowicz, indica que “el fundamento fisiológico del alivio que nos genera consumir un caldo de pollo se debe a que es un buen hidratante. En cuadros donde podría haber fiebre o estados subfebriles, la deshidratación es habitual, por eso toma aún más relevancia mantenerse hidratado”.
El mejor tratamiento para el resfriado común es llevar una dieta equilibrada, descansar suficiente y beber líquidos calientes, indica Kiumars Saketkhoo, neumólogo e intensivista de PIH Health.
Por último, en cuados de gripe o resfrío, se aconseja incluir sopas o caldos, “infusiones tibias, jaleas y compotas, siempre va a ayudar en la hidratación, ya que tienen un alto porcentaje de humedad”, menciona Yael Toporowicz. Incluido con la guía médica de un especialista.