Un grupo de investigadores desmienten que el ser humano necesite beber ocho vasos de agua al día (dos litros aproximadamente) de manera estándar, y asegura que el consumo diario de líquido está determinado por varios factores individuales de cada persona, afirma un estudio difundido por la revista Science.
Los científicos estudiaron a más de 5.600 personas, de diferentes edades, género y partes del mundo, que decían beber desde 1 hasta 10 litros de agua por día.
Los participantes recibieron 100 mililitros de “agua doblemente etiquetada” con deuterio, un isótopo de hidrógeno y Oxígeno-18, un isótopo de oxígeno, un bebestible que en pequeñas cantidades es seguro.
“Si se mide el ritmo al que una persona elimina esos isótopos estables a través de la orina en el transcurso de una semana, el isótopo de hidrógeno puede decirnos cuánta agua está reemplazando, y la eliminación del isótopo de oxígeno puede decirnos cuántas calorías está quemando”, afirmó Dale Schoeller, coautor del estudio.
No hay “una cantidad única” de agua al día
Tras revisar sus resultados, los científicos llegaron a la conclusión de que la ingesta diaria de agua ideal varía según la edad, el género, el nivel de actividad física y el clima.
“El estudio actual indica claramente que no hay una cantidad única para las directrices sobre el agua potable, y la sugerencia común de que deberíamos beber ocho vasos de agua de 8 onzas al día (~2 litros) no está respaldada por pruebas objetivas”, aseguraron los investigadores.
En condiciones similares, un varón deportista de 20 años, con 70 kg y que vive al nivel del mar con un 50% de humedad y una temperatura de 10°C tendrá una renovación de agua de unos 3,2 litros al día.
Una mujer no atlética de la misma edad y en las mismas condiciones tendrá una renovación de agua de unos 2,7 litros diarios, es decir, las damas necesitaban normalmente medio litro menos de agua que los varones.
Movimiento y el clima
De todas maneras, los investigadores recalcaron que la cantidad de energía usada al día, así como el peso corporal, el aumento de la humedad o de la temperatura, las mujeres embarazadas y el trabajo físico o atlético, son todos factores a tomar en cuenta a la hora de hidratarse.
Quienes bebían 10 litros de agua al día, por lo general, eran hombres expuestos a un clima cálido, que trabajaban activamente con su cuerpo, eran atletas o forrajeadores del Ecuador amazónico.
En tanto, las personas que llevan un estilo de vida sedentario en ambientes interiores con temperatura controlada necesitaban una renovación de agua menor que las personas que trabajan de forma física.
“La mejora de las guías es cada vez más importante debido al explosivo crecimiento de la población y al cambio climático al que se enfrenta actualmente el mundo, que afectará a la disponibilidad de agua para el consumo humano”, concluyen los investigadores.