Al ser una patología progresiva con el tiempo, la demora en las consultas debido a la pandemia provocó muchas consecuencias como pérdidas de unidades renales, dolor crónico, infecciones recurrentes, incluso apresurar el ingreso a diálisis de los pacientes.
Como una patología muy frecuente, en alza y con graves consecuencias describe el doctor Felipe Águila, urólogo del Hospital San José, la formación de cálculos renales, un problema recurrente pero poco reconocido.
Según el especialista, este problema afectará a 1 de cada 5 personas en Chile, por lo que es importante estar informado y conocer sus señales.
Es por ello que el Hospital San José lanzó por sexto año la campaña “Semana del Cálculo Renal en Chile”, entre el 24 al 28 de octubre.
¿Qué son los cálculos renales?
Los cálculos renales son una enfermedad metabólica crónica que se produce por un desbalance urinario, que determina una precipitación de cristales, los cuales van a formar verdaderas rocas o piedras al interior de la vía urinaria.
Águila explica que existen condiciones genéticas asociadas, sin embargo, es una enfermedad que está en gran medida determinada por factores prevenibles como la deshidratación (beber pocos líquidos), obesidad, sedentarismo y una dieta rica en proteínas animales, entre otros.
El especialista en esta enfermedad es el endourólogo, que son urólogos sub especializados en el área.
Síntomas
Generalmente, en sus inicios, los cálculos no suele tener síntomas, lo que cambia cuando se desplaza al riñón o pasa a uno de los uréteres -los conductos que conectan los riñones y la vejiga-.
Lee también...Cálculos renales en mujeres: el inesperado factor que puede desencadenar su desarrollo en ellas Sábado 24 Abril, 2021 | 10:11“Si un cálculo renal queda alojado en los uréteres, puede bloquear el flujo de orina y hacer que el riñón se hinche y el uréter tenga espasmos, lo que puede ser muy doloroso”, asegura la Clínica Mayo.
A partir de ahí se pueden comenzar a ver síntomas como:
– Dolor punzante e intenso en los costados y la espalda, debajo de las costillas
– Dolor que se propaga hacia la parte baja del abdomen y la ingle
– Dolor que viene en oleadas y cuya intensidad fluctúa
– Dolor o sensación de ardor al orinar
– Orina de color rosado, rojo o marrón- Orina turbia o con olor desagradable
– Necesidad constante de orinar, necesidad de orinar con mayor frecuencia u orinar en pequeñas cantidades
– Náuseas y vómitos
– Fiebre y escalofríos si existe una infecciónEs recomendable buscar ayuda médica cuando el dolor sea tan intenso que no puedes sentarte cómoda; si aparece dolor con náuseas y vómitos, fiebre y escalofríos, sangre en la orina y dificultad para orinar.
¿En qué edad es más frecuente?
Respecto de la edad en que es más frecuente que una persona sufra de cálculos renales, precisa que cada vez son más habitual en pacientes pediátricos y jóvenes. Sin embargo, el grupo etario más afectado es entre los 40 y 60 años.
En Chile, debido a los índices de obesidad y estilo de alimentación, se estima que existe una prevalencia cercana al 10-15% de la población.
“Efectivamente, en los últimos 20 años es una enfermedad que ha aumentado de manera considerable en Chile y en el mundo”, sentencia el médico.
“Corresponde a la urgencia urológica más frecuente, también representa la primera causa de requerir una cirugía urológica no programada, afecta a las personas a una edad donde habitualmente son jefes de hogar, por tanto, los costos sociales y productivos son inconmensurables”, añade también.
“Hoy, después de las enfermedades derivadas de la próstata, es lo que más nos derivan desde la atención primaria de salud”, específica.
¿Pueden volver los cálculos?
Consultado por la posibilidad que un paciente que ya presentó cálculos vuelva a tenerlos, el especialista comenta que “lamentablemente, es una enfermedad prevalente, con incidencia en alza, y con una altísima recurrencia”.
“Como se trata de una enfermedad crónica, una vez producido un cólico renal con la expulsión o necesidad de extracción quirúrgica de la piedra, la probabilidad de presentar otro evento es de 17% a un año y de un 50%, a los cinco años”, informa.
Largas esperas
Como en la mayoría de las patologías principalmente crónicas, la pandemia también influyó en el diagnóstico y en algunos casos las consecuencias de los retrasos han sido críticos.
“La litiasis urinaria en todo el mundo sufrió una postergación en la atención oportuna y cirugías por culpa de la pandemia. Numerosos reportes han demostrado lo complejo de esta situación”, afirma.
“Al ser una patología progresiva con el tiempo, la demora en las consultas provocó muchas consecuencias como pérdidas de unidades renales, dolor crónico, infecciones recurrentes, incluso apresurar el ingreso a diálisis de los pacientes”, precisa.
Actualmente, hay listas de espera para cirugías, especialmente en el sistema público de salud, que atiende al 80% de la población.
“Esta enfermedad se encuentra en el subgrupo de patologías denominadas No GES. Esto implica que no existen plazos para su resolución, lo cual sin duda provoca retrasos y consecuencias directas para quienes poseen la patología”, dice.
“En nuestro hospital los cálculos renales son el 40% de las cirugías pendientes por operar”, explica.
Infórmate
Para el especialista, la mejor prevención para evitar la formación de cálculos renales es informarse y para ello, el Hospital San José realiza hace seis años la campaña “Semana del Cálculo Renal en Chile” con el lema “Síguenos, Infórmate y Cuídate, lo que importa es saber”.
“Los cálculos renales no son una enfermedad rara, al contrario, afectará a 1 de cada 5 personas. Informarse es el primer paso para la autogestión en salud”, indica.
Los elementos que más impactan en la prevención es la adecuada hidratación, prevenir la obesidad, tener una dieta equilibrada, saludable y bajar la ingesta diaria de sal.
Si se habla de los riesgos de no tratar o prevenir el problema, estps son variados, al ser una patología que en muchos casos requerirá cirugía, determina en muchos casos consecuencias personales y familiares.