La sífilis, gonorrea, clamidia, herpes, VIH y Virus del Papiloma Humano (VPH), son algunas de las infecciones de transmisión sexual (ITS) más frecuentes en Chile, de acuerdo a la Diprece del Ministerio de Salud.
La constante alza de casos de ITS en el país hacen necesario conocer más sobre el uso de diversos métodos de protección, entre ellos se encuentra el poco conocido condón femenino.
Este es capaz de proteger, simultáneamente, de un embarazo no deseado y de infecciones de transmisión sexual. Es el preservativo o condón femenino, que está disponible de forma gratuita en los centros de salud del país y que, por distintos factores, no goza de la misma popularidad que su versión masculina.
Se trata de un insumo que está confeccionado con poliuretano y/o nitrilo, cubierto de lubricante y compuesto por dos anillos y una tela tubular flexible unida por dos anillos que se encaja en la vagina previo a la relación sexual.
“Incluso se pueden poner ocho horas antes”, detalla la matrona Pilar Villegas de la Salud Municipal de Hualpén, apuntando a su primera gran diferencia con el preservativo masculino, que sólo sirve en un pene erecto.
La eficacia del condón femenino
El condón femenino es efectivo. Se estima, apunta la especialista, que si se utiliza de manera correcta, su efectividad alcanza el 95%. Es decir, 5 de 100 mujeres podría no tener los resultados deseados.
En el uso habitual, en que podrían existir errores, la eficacia se sitúa entre el 75% y el 82%.
Entre las razones por las que el condón femenino puede fallar se encuentra una ruptura, defectos de fabricación o derramamiento del contenido del condón mientras se retira.
Por eso, si está disponible y de manera gratuita, la importancia de saber usarlo bien.
El paso a paso
1. El envase: Lo primero, apunta la matrona de la Salud Municipal de Hualpén Claudia Córdova, es fijarse en el envase del condón femenino, “verificar bien su buen estado, que no tenga roturas, que obviamente no esté abierto y ver la fecha de vencimiento”.
“Al abrirlo, no hay que hacerlo ni con los dientes ni con tijeras, porque podemos pasar a llevar el condón que está en su interior”, agrega. Por eso, continúa, el paquete tiene un prepicado que facilita la apertura con las manos.
2. Posición cómoda: El segundo paso, sigue, es comenzar a poner el condón. “Esto pueden hacerlo en un lugar cómodo, entendiendo que esto va al interior de la vagina. Quienes lo usen tienen que ponerse, primero, cómodas. Puede ser sentada, con un pie sobre una silla, recostada o en cuclillas”, dice la experta de la Salud Municipal de Hualpén.
“La primera vez puede ser un poco incómodo, pero hay que autoconocerse para saber cuál es la forma que resulte más práctica y cómoda”, agrega.
3. Poner el preservativo: Con el condón femenino fuera del paquete y ya en la posición cómoda, se debe “apretar los lados del anillo del extremo en que está cerrado el condón, para hacerlo más pequeño e introducirlo en el orificio vaginal”.
“Una vez que se introduce dentro de la vagina, se debe empujar con el dedo índice o dedo medio hacia el interior del canal vaginal”, continúa Córdova, añadiendo que el condón no se debe torcer y que, si eso ocurre, se puede sacar y volver a introducir.
4. Anillo externo: De esta forma, el anillo externo -que es bastante blando y que no debería producir molestias-, debe quedar fuera de la vagina, protegiendo los órganos sexuales externos.
5. Sujetar: El anillo externo tiene que ser sujetado y, al momento de la penetración, se debe dirigir el aparato reproductor masculino por el orificio del condón.
“Así evitamos que el pene entre por el lado, por abajo o por arriba. Debe entrar por el condón. Una vez que eso esté resuelto, podemos dejar de sujetarlo”, afirma.
6. Retirar: El último paso, tras la relación sexual, es retirar el preservativo. Esto, señala Córdova, debe hacerse “suavemente” e idealmente antes de levantarse del lugar. “Para hacerlo tomamos el anillo exterior y lo torcemos o enrollamos. Así evitamos que el semen se derrame. Después hay que tirarlo a la basura”, detalla, pues tal como el condón masculino, estos no se pueden volver a utilizar.