El Gobierno de Ghana declaró este fin de semana el primer brote del virus de Marburgo registrado este año en dicho país, esto luego de que dos personas fallecieran de manera fulminante a solo horas de buscar atención médica.
El virus de Marburgo es un tipo de infección portada por murciélagos que producen lo que también se conoce como “fiebre hemorrágica” debido a sus características.
Esta enfermedad tiene un alto índice de letalidad. De acuerdo a información entregada por EFE, el 88% de los pacientes contagiados muere.
Enfermedad “desatendida”
El infectólogo de Clínica Las Condes, Rodrigo Blamey, explica que este virus detectado en la ciudad alemana de Marburg -de ahí su nombre-, se trata de una enfermedad “desatendida”, esto ya que pertenece a las “enfermedades endémicas de África, que han estado presentes por décadas y que hay muy poca investigación acerca de ellas”.
Esto se debería a que “no han afectado de manera importante a países desarrollados y que cuando salen de África, como la viruela símica y el ébola, recién ahí se les presta atención”, detalló el profesional.
Sintomatología del virus de Marburgo
De acuerdo al infectólogo, la enfermedad producida por este virus consta de dos fases. La primera manifiesta “síntomas generales como fiebre, dolor muscular, de cabeza, náuseas, dolor abdominal y diarrea durante los primeros cinco días”, dijo.
“Luego pasa a una fase de mayor gravedad donde hay compromiso de órganos y alteración de conciencia. En la segunda semana, el paciente entra en shock y fallece”, explicó Blamey.
Según la Organización Mundial de la Salud, este mayor compromiso se debe a la hemorragia interna y externa que produce el virus, la cual se puede expulsar en “el vómito y las heces” además de “la nariz, las encías y la vagina”.
Las venopunciones -colocación de vías o suministro de medicamentos mediante inyecciones- también pueden representar un problema para estos pacientes, asegura la organización.
Transmisión y tratamiento
La transmisión o contagio del virus de Marburgo se da mediante “el contacto directo con los pacientes o cadáveres infectados, también se da cuando hay contacto con elementos contaminados como la ropa o ropa de cama, etc. o por secreciones”, describió el profesional.
Respecto al tratamiento, tanto el profesional como la OMS afirmaron que no existen métodos autorizados para hacerle frente ni cura.
El infectólogo agregó que la posibilidad de que el virus llegue al país es muy baja debido a la alta letalidad que significa para los pacientes.
“La sintomatología es tan grave que es poco probable que alguien llegue (al país) enfermo en estas condiciones. Podría ser que alguien llegue en periodo de incubación y sin síntomas aparentes”, concluyó.