La actriz chilena Mayte Rodríguez vivió un altercado con sus seguidores de Instagram, luego de que estos la criticaran por la alimentación de su hijo Galo.
Mediante una storie, la mujer subió una fotografía de su bebé de espaldas con el texto “con 5 meses hoy probó su primera fruta” junto al emoji de una pera.
Por esto, Rodríguez fue duramente criticada, misma razón por la que alzó la voz en otra publicación más tarde, en ella escribió: “Take it easy (tómenlo con calma), es solo pera y recomendado por el pediatra, así, llegando al sexto mes, está preparado para comer más cosas”, explicó a sus seguidores.
Sin embargo, para muchos quedó la duda sobre en qué etapa del desarrollo de los bebés es adecuado comenzar la alimentación con productos sólidos.
¿A qué edad es adecuado comenzar a alimentar con sólidos a los bebés?
De acuerdo a la pediatra de Clínica Los Carrera, Melina Bosio, “se recomienda la lactancia materna exclusiva hasta los seis meses de vida“, explica.
“A partir de esa edad, un niño que ya puede sostener su cabeza, sentarse solo (con apoyo mínimo o sin apoyo) y que tiene la aptitud de abrir la boca para recibir el alimento, puede empezar a comer alimentos sólidos que se van incorporando de a poco“, detalla la profesional.
Sobre el consumo de frutas, la especialista dice que “la incorporación también se hace en el sexto mes“.
Cómo iniciar la alimentación en bebés
Bosio explica que en las primeras instancias las frutas no deben darse completamente sólidas, sino que “como una papilla pasado por una procesadora o pisada por un tenedor”.
“A medida que el niño va creciendo y va adquiriendo esta habilidad de mover su mandíbula con movimientos masticatorios y tragar, eso se va afirmando y el niño puede empezar a ir ingiriendo alimentos cada vez en pedacitos un poco más grandes“, explica la pediatra.
No obstante, “eso depende mucho de cada niño. En realidad hay algunos que lo hacen muy temprano y hay otros que ya de más grandes recién adquieren la habilidad”, advirtió la profesional.
En el caso específico de las frutas, Bosio recomienda ofrecerlas limpias y frescas, “al principio se pueden ofrecer cocidas, como por ejemplo una manzana o una pera. Primero en forma de puré o picada y después, a medida que el niño crece, se agrandan las porciones“, detalla.