Desde el próximo jueves 14 de abril el uso de mascarillas en Chile se flexibilizará en espacios abiertos donde exista una distancia física de, al menos, un metro y si la comuna se encuentra en fases de bajo o medio impacto sanitario.
La medida tomó por sorpresa a varios y a pesar de que no es obligatorio dejar de utilizarla bajo las mencionadas condiciones, la situación puede causar ansiedad en algunas personas.
Tal fue el caso en países como Estados Unidos, Australia, Francia, entre otros, los cuales desde mediados del año pasado flexibilizaron su utilización.
Encontrarse frente a una multitud de personas, a la distancia exigida, pero sin mascarilla -una medida que se tomó para proteger del virus- puede hacer que las personas se sientan vulnerables.
Por ello es posible encontrarse con quienes afirman que continuaran usándolas para evitar el contagio o que directamente se sienten ansiosos ante el cambio.
“No usar una mascarilla ha sido una señal de peligro los últimos dos años”, por lo que no es inesperado que exista una reacción emocional ante la flexibilización, consignó la revista de salud Health a mediados de marzo pasado.
En consecuencia, algunas personas, quienes conviven con o pertenecen a grupos de riesgo, pueden sentirse indefensas e incluso culpables no utilizando mascarillas.
¿Cómo manejarla?
De acuerdo a William Schaffner, profesor de medicina preventiva y enfermedades infecciosas en el Centro Médico de la Universidad de Vanderbilt, en una conversación con Healthline, es normal sentirse ansioso ante el cambio.
La neuropsicológa y directora de Comprehend the Mind, Sanam Hafeez, declaró que lo primordial para poder manejar el estrés que causa la medida es comprender qué es la ansiedad.
Según el sitio especializado en salud, lo siguiente que puede ayudar a disminuir el estrés es informarse, preguntar a un doctor y revisar investigaciones científicas: “La ciencia nos dijo que usar mascarillas era necesario y ahora nos dice que gracias a las vacunas y las nuevas variantes, el Covid es menos peligroso, por lo que deberíamos confiar en ella”, aseguró Georgia Gaveras, directora médica y cofundadora de Talkiatry.
Disminuir su uso de manera gradual también puede ayudar a afrontar la nueva medida, Hafeez sugirió “exponerse gradualmente a lugares o situaciones que te pongan nervioso y en esa medida crear una jerarquía desde lo más desafiante a lo menos”.
Finalmente, los especialistas recomiendan que el método que más puede ayudar a mejorar la ansiedad ante el uso de mascarillas es vacunarse y tener la dosis de refuerzo, para disminuir las probabilidades de contagio.