El café tiene múltiples beneficios para el cuerpo, pero en exceso, puede deshidratar y aumentar la presión arterial, entre otros. Esta sustancia se produce naturalmente en las hojas y semillas de algunas plantas y actúa como estimulante en el sistema nervioso central, aumentando los niveles de alerta.
En porciones moderadas, puede producir varios beneficios, sin embargo, el consumo excesivo puede dañar seriamente el organismo.
“El consumo moderado de café (2 tazas al día) protege contra enfermedades como la insuficiencia cardíaca, reduce el riesgo de sufrir un accidente cerebrovascular y ayuda a disminuir el hígado graso, explica Alejandra Alarcón, nutricionista del Programa de Obesidad y Diabetes de Clínica Universidad de los Andes.
Dentro de los beneficios que tiene esta sustancia se encuentran:
– Aumenta la energía.
– Estimula el metabolismo.
– Proporciona antioxidantes.
El problema es cuando el cerebro comienza a sentir la pérdida del efecto estimulante y comienza a necesitar una nueva dosis, como sucede con cualquier droga.
¿Cuándo es mucho café?
Entre 300 y 400 mg es la cantidad máxima de cafeína que una persona puede consumir en un día, lo que equivale a 3 o 4 tazas de café.
Se puede ingerir a través de diferentes alimentos y bebidas, como el chocolate, el café, el té y las bebidas energéticas, lo que dificulta la tarea de no superar la dosis indicada como saludable.
Los excesos de cafeína pueden producir, entre otras cosas, síndrome de abstinencia, deshidratación, gastritis y dificultad para dormir, todos estos efectos negativos se traducen en una mayor presión arterial y en un aumento del riesgo cardiovascular.
Por lo tanto, es muy importante controlar la cantidad que se consume a diario, aunque las recomendaciones de ingesta pueden variar dependiendo de la persona, ya que cada persona tolera de forma distinta las cantidades de cafeína.